El sector de la construcción es uno de los sectores de la industria donde más innovaciones ocurren, sobre todo por ser una de las áreas más contaminantes con emisiones de dióxido de carbono y otros gases perjudiciales. La búsqueda se centra en encontrar sustitutos más amigables. Entre los materiales de mayor criticidad en este sentido está el cemento pero ahora podemos decirle adiós ya que se ha inventado un método para imprimir casas empleando solo tierra.
El cemento en la construcción actual
El cemento es un material fundamental en la preparación del hormigón, que es el ingrediente principal, en la actualidad, para la construcción de casas y otras edificaciones modernas. Su uso tan extendido se debe a que es muy versátil y, por su característica ductilidad, permite hacer diferentes formas y piezas constructivas. Adicionalmente tiene una vida media muy larga y, una vez endurecido, tiene gran resistencia.
Sin embargo, tiene múltiples inconvenientes medioambientales, como el producir emisiones de dióxido de carbono calculándose que es el causante del 11 % liberado a la atmósfera en el mundo durante la producción y utilización de este material, esto sin contar con la gran cantidad de energía que usa. Se está en la búsqueda de preparados que sean sostenibles manteniendo sus propiedades.
Una empresa que usa materiales sostenibles para construir casas
Una compañía de Asia llamada Lib Work, que tiene su sede en Japón, lidera un proyecto junto con la firma de ingeniería Arup, también japonesa, y el fabricante de impresoras 3D italiano llamado WASP que consiste en fabricar un modelo de casa sostenible donde no se usa cemento en su estructura, sino un material especial desarrollado por el consorcio que brinda una resistencia muy similar al hormigón.
La mezcla está compuesta por cal, fibras naturales pero sobre todas las cosas principalmente, tierra (esta metodología será una dura competencia de esta otra que emula los arrecifes de coral). Es más, el prototipo de esta casa ya fue construido y se encuentra en la Prefectura de Kumamoto, concretamente en la localidad de Yamaga, Japón. Fue bautizada como Lib Earth House Model B y tiene un área total de 100 metros cuadrados.
Para su elaboración se usa una impresora en 3D que sigue un diseño digital previamente programado, que va creando la estructura base por capas de material. Una vez finalizada la misma, cuadrillas compuestas por personas se encargan de todos los acabados que incluyen puertas, ventanas, techo e instalaciones eléctricas y sanitarias. Su diseño interior es de estilo moderno, amplio e iluminado.
Un punto importante de esta vivienda sin cemento es la alta tecnología que posee y que también la hace sostenible. Así, sus sistemas de iluminación y climatización automática pueden ser gestionados desde un móvil inteligente utilizando una aplicación a tal efecto, igualmente, es energéticamente autosuficiente gracias a su sistema fotovoltaico con un mecanismo exclusivo Tesla Powerwall para el almacenamiento de energía.
Las ventajas del uso de este material para la construcción de viviendas
Los beneficios ambientales, económicos y energéticos son muchos puesto que hay una gran disminución de las emisiones de CO2 al no usar cemento, el material es biodegradable al final de su vida útil y como se usa tierra común disponible en el entorno la economía local se ve robustecida. Adicionalmente, es una construcción muy rápida de erigir, siendo también de costo muy accesible por lo que podrán adquirirla personas de bajos recursos económicos.
En conclusión, en Asia están diciendo adiós al cemento para la construcción de casas, utilizando un material biodegradable a base de tierra común con otros añadidos igualmente naturales (como este que está sustituyendo al mortero de concreto en España). Las casas lucen espectaculares y ya está hecho el primer prototipo, el cual es completamente autónomo energéticamente y gestionable con una aplicación de smartphone.