Siempre, en todas las iniciativas y decisiones, hay personas que se oponen o que no están de acuerdo con la idea planteada y esto está en la naturaleza humana. De hecho, es una de las bases de la democracia donde la mayoría es la que debe decidir. Sin embargo, cuando esta oposición se hace violenta esto resulta preocupante porque, tal y como España teme, se transforma en vandalismo. Como en este ejemplo.
El saboteo y el vandalismo contra los parques eólicos en Europa
En años recientes las fuentes energéticas renovables han tenido un gran auge, entre ellas destaca la de origen eólico que forma parte de la estrategia de los diferentes países, entre ellos España, para la disminución de las emisiones de gases como el CO2 y los óxidos nitrosos, entre otros. Pero algunas instalaciones han sido víctimas de sabotaje y daños por parte de grupos violentos que están en contra de estas construcciones.
Dichos sabotajes consisten en incendios que han sido provocados, cortes y robos de conductores, daños a los aerogeneradores, ataques e intimidación al personal que trabaja en la obra, entre otros. Por lo general, estos grupos que se oponen por considerar que se causan daños ambientales y a los ecosistemas, actúan apegados a la ley pero otros son los que quieren impedir la construcción empleando métodos ilegales.
Hechos violentos en contra de la construcción de un parque eólico en Italia hacen temer a España
El día tres de julio un grupo de aproximadamente 50 encapuchados se presentó en el sitio de construcción de un parque eólico ubicado en Monte Giogo del Villore en Mugello, región Toscana en Italia. Este grupo que estaba armado con cuchillos y llevaba perros muy agresivos empezó por rodear a los leñadores, quitándoles las motosierras y otras herramientas, después causaron grandes daños a sus vehículos.
Posteriormente, agredieron verbalmente, amenazaron y empujaron a tres ingenieros de la empresa Agsm Aim, que es la compañía constructora, que estaban presentes en la obra y los obligaron a abandonar el sitio junto con el personal técnico y obrero con el fin de detener las obras. Luego se dedicaron a dañar y destruir la infraestructura y las maquinarias, llegando incluso a incendiarlas.
Apenas la empresa se enteró, comunicó el incidente a los Carabineros de Borgo San Lorenzo quienes de inmediato fueron al sitio a fin de constatar los daños e iniciar las investigaciones para determinar responsabilidades (de hecho, esta actuación en contra de esta instalación es similar a los actos vandálicos contra los coches de Tesla). De acuerdo a la empresa, esta reacción fue producto de unos volantes.
Los que fueron distribuidos por un grupo autodenominado Siamo Montagna, o Somos Montaña, que informaba sobre un “Campamento de Lucha” programado para el periodo de entre el dos y el seis de julio que tenía como propósito detener la obra por lo que Agsm Aim procedió a denunciarlos ante los carabineros y la Fiscalía. España permanece alerta para que actos como este no ocurran en su territorio.
El proyecto del parque eólico en construcción
Esta obra ha sido clasificada como de utilidad pública por las autoridades italianas como parte del Plan Nacional de Energía y Clima y contempla la puesta en servicio, en la cumbre del Monte Giogo, de siete turbinas eólicas que tendrán 95 metros de altura con una capacidad de 30,7 MW en conjunto y potencia de generación de 80 millones de kWh anuales, por lo que competirá con España en capacidad de renovables.
Los incidentes violentos en contra de una obra en construcción de energía eólica en Italia no son incidentes aislados, por lo que en Europa temen que se repitan con diferentes armas (que serían indetectables como esta que utilizaron contra el autónomo de Tesla). Aunque no se han producido estos actos en sus construcciones, España está en alerta máxima para evitarlos.