La Dirección General de Tráfico ha puesto el foco en las furgonetas durante una semana completa y el resultado no es precisamente para presumir. Entre el 24 y el 30 de noviembre se controlaron 120.922 vehículos de este tipo en carretera y 8.144 conductores fueron denunciados por saltarse alguna norma. No son cuatro despistados: hablamos de un vehículo muy presente en nuestro día a día, desde repartos hasta servicios a domicilio.
Según ha informado la DGT, la infracción más repetida fue el exceso de velocidad, pero no fue la única sorpresa. ITV caducada, neumáticos en mal estado, falta de seguro e incluso positivos en alcohol y drogas completan un cuadro que preocupa a los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil. Porque al final, detrás de cada multa puede haber un siniestro que sí llega a los titulares.
Velocidad: la principal infracción en las furgonetas
En esta campaña, casi 3 de cada 10 infracciones detectadas tenían que ver con la velocidad. En total, 2.288 conductores de furgoneta fueron denunciados por circular por encima de los límites permitidos. No es un detalle menor si recordamos que estos vehículos pesan más y necesitan más metros para frenar.
La DGT recuerda que las furgonetas tienen límites distintos a los turismos. En autopistas y autovías no pueden pasar de 90 kilómetros por hora y en carreteras convencionales el máximo es 80. Aun así, muchos conductores siguen conduciendo “como si fuera un coche más”, sin tener en cuenta que, en caso de susto, parar a tiempo es bastante más difícil.
ITV, neumáticos y furgonetas inmovilizadas
Otro punto caliente de la campaña ha sido el estado del vehículo. Más de 2.200 conductores fueron denunciados por circular sin la ITV en regla, lo que representa cerca de una tercera parte de todas las infracciones recogidas. Traducido: furgonetas trabajando cada día sin las revisiones mínimas para comprobar que frenan bien, que contaminan lo que toca o que las luces funcionan.
Los agentes también detectaron 240 furgonetas con los neumáticos en mal estado, algo que cualquiera nota en un día de lluvia cuando el coche “flota” más de la cuenta. Además, 220 vehículos tuvieron que ser directamente inmovilizados por no reunir las condiciones mínimas de seguridad. En estos casos, la furgoneta no solo es una herramienta de trabajo: se convierte en un riesgo rodante.
Alcohol, drogas y cinturón: el riesgo se dispara
La campaña también incluyó controles de alcohol y drogas. En total, 322 conductores de furgoneta dieron positivo: 90 en alcohol y 232 en otras drogas. Es decir, gente al volante de un vehículo pesado, muchas veces cargado, con sus reflejos claramente alterados. La mezcla perfecta para que un pequeño error acabe en un golpe serio.
A esto se suma que 363 ocupantes de furgonetas fueron denunciados por no usar el cinturón de seguridad. Es ese gesto que muchos todavía se saltan “porque es solo un momento” o “voy aquí al lado”. Sin embargo, los expertos recuerdan que el cinturón sigue siendo uno de los elementos que más vidas ha salvado en carretera. Y cuando hablamos de un vehículo más grande y pesado, la diferencia entre llevarlo o no se nota todavía más.
Carga, papeles y seguro: los grandes olvidados
La forma de cargar la furgoneta también ha dado que hablar en esta campaña. 320 conductores fueron denunciados por exceder el peso permitido y 267 por llevar la carga mal distribuida. Puede sonar a cosa menor, pero una carga mal sujeta puede desplazarse en un frenazo o una curva y hacer que el vehículo sea imposible de controlar. Y eso, en un atasco o en una carretera comarcal, es un susto que nadie quiere vivir.
Por último, la DGT destaca 536 denuncias relacionadas con la documentación de vehículo y conductor y 191 por circular sin el seguro obligatorio. Es decir, furgonetas que no solo suponen un riesgo en la vía, sino que además dejan completamente desprotegidas a las víctimas en caso de accidente. En el fondo, la campaña lanza un mensaje sencillo: quien conduce una furgoneta por trabajo tiene todavía más responsabilidad, porque cualquier fallo afecta también al resto.
El comunicado principal ha sido publicado por la Dirección General de Tráfico.












