Hasta el presente, el establecimiento de horarios en verano e invierno ha estado marcado por el tiempo en el que el sol realiza su recorrido a diario. Sin embargo, parece que en 2025 esto podría ser diferente, así que habrá que estar atentos con el cambio, así como también de lo que publica el BOE.
La modificación de la hora no es muy popular
Desde hace muchos años, se ha hecho costumbre el modificar el ajuste de los relojes sumando o restando 60 minutos en los meses de marzo y octubre, respectivamente, en los países de la Unión Europea. Esta es una medida que no cuenta con la aprobación de la mayoría de la población, pero, aún así, sigue en vigencia.
Sin embargo, a partir de este 2025 las cosas podrían ser muy diferentes, porque es posible que esta sea la última vez que sea necesario adelantar o atrasar los relojes. Pues es muy llamativo que el BOE tiene señaladas las fechas en que se deben hacer las modificaciones de hora, y las últimas indicadas son las del 2026.
El cambio que divide a los españoles
En los años 70 se vivió una crisis causada por la falta de petróleo, por lo que fue necesario tomar varias medidas para evitar más inconvenientes. Una de esas fue la de hacer modificaciones para aprovechar más el tiempo de sol, lo cual significó que se adelantara una hora en marzo y se atrasara otra en octubre.
Esa norma se ha mantenido hasta el presente, y el BOE es el encargado de anunciar las fechas exactas en las que se debe realizar el ajuste de los relojes. Pero últimamente se ha evidenciado que un número cada vez mayor de personas está en contra (aunque preferirían que el día durara 25 horas como dicen los expertos que sucederá).
La primera y más importante es porque produce malestares físicos que inciden en el estado de salud. Y esto es apoyado por diferentes estudios, que demuestran que el cambio en el reloj tiene una influencia negativa sobre el ciclo circadiano, y afecta el sueño, por lo que sería preferible evitar esa alteración.
Por otra parte, quienes prefieren que esas modificaciones continúen, señalan que una de sus ventajas es que permite disfrutar más la luz solar en el verano. Y esto, a su vez, favorece que las personas pasen más tiempo fuera de sus hogares, fomentando así el turismo y las actividades comerciales.
Sin embargo, solo el 22% de los españoles está de acuerdo con el cambio e incluso, en la consulta realizada a 4.6 millones de habitantes de la UE, se muestra que el 80% prefiere que esa norma sea eliminada. A pesar de eso, este 2025 se mantendrá igual, aunque esta puede ser la última vez.
Este puede ser el último ajuste de acuerdo a el BOE
La polémica causada por el cambio de hora en marzo y octubre puede llegar a su fin dentro de poco tiempo. Pues el BOE solo tiene las indicaciones relacionadas con el cambio hasta el año 2026, de ahí en adelante todo es una incógnita, pues hasta ahora no hay ningún tipo de información al respecto.
Lo cual genera una gran incertidumbre, pues hasta el momento presente los países de la UE no se han puesto de acuerdo sobre este tema. Lo único que se sabe actualmente es que la mayor parte de la población preferiría contar con una medición del tiempo única, por diversos motivos, sobre todo por su bienestar general.
Concluyendo, el cambio de hora en los meses de marzo y octubre es producto de una crisis de los años 70. Pero en la actualidad, la mayoría de los habitantes de España no están de acuerdo con esa norma (como no lo estuvieron cuando en dos días cambió la edad legal para la jubilación).








