La búsqueda de nuevas fuentes de energías es un tema complejo, en el que se tienen que sopesar costos y beneficios para no terminar creando problemas como la temible energía que llevó a la quiebra a dos países. Es por eso que el costoso proyecto de esta central energética, que parece contar con el respaldo de todas las autoridades locales, se está preparando para afrontar serios cuestionamientos.
La polémica tras la central energética más potente de Europa
La comarca leonesa de Cabrera es una de las áreas más despobladas de España, con apenas tres habitantes por kilómetro cuadrado. Esta comunidad enclavada en las montañas está quedando abandonada ya que su población no se renueva desde hace tiempo. Sin embargo, es en este pequeño poblado que se encuentra un punto estratégico que podría generar grandes cantidades de energía limpia.
Estamos hablando del cauce del río Cabrera, que discurre entre las altas montañas de la región y puede aprovecharse para construir una revolucionaria central energética. Sin embargo, el punto donde se llevaría a cabo el proyecto se encuentra entre dos antiguas estructuras romanas de gran importancia y que han sido declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
El proyecto proviene de la empresa Capital Energy, que ya cuenta con el apoyo de las autoridades de las dos regiones que estarían mayormente implicadas. La propuesta consiste en crear un embalse artificial en el cauce del río para elevar el nivel del agua hasta una montaña cerca. Ahí se construiría otro embalse y se dejaría caer el agua a través de una sima perforada en la montaña en un recorrido de 900 metros.
Un proyecto innovador y costoso
La compañía está a la espera de financiación estatal en la medida que más autoridades vayan respaldando el proyecto. Deberían reunir 1200 millones de euros para poder ponerlo en marcha pero no esperan demoras. El conflicto en Ucrania ha alarmado a toda la UE ante la posibilidad de un corte de suministro de combustibles fósiles, por lo que esta planta podría ser un recurso clave.
Además de los embalses y la titánica perforación a través de la montaña, se instalaría una turbina hidroeléctrica al final de la caída, por lo que podría generar un flojo eléctrico permanente y podría llegar a producir el equivalente a dos centrales nucleares. Según la empresa, todo este proceso es «reversible».
Esta central energética podría abastecer a una gran cantidad de población con energía limpia y un suministro estable y renovable. Sin embargo, la comarca está a sólo 200 metros de los canales romanos y a 20 kilómetros de Las Médulas, la mina de oro más importante del Imperio Romano. Ambas reliquias han sido declaradas Patrimonio de la Humanidad y son un gran tesoro histórico.
Una vez más el progreso se choca con la historia
Es una realidad que la necesidad de una fuente de energía alternativa es una urgencia de primer orden. Necesitamos electricidad para todos los aspectos de nuestras vidas, y el conflicto en el este parece extenderse cada vez más. Realizar los estudios de impacto ambiental necesarios con el posible resultado de la suspensión del proyecto podría dejarnos sin electricidad en un futuro cercano.
Por otro lado, aunque Capital Energy insiste en la «reversibilidad» de la planta energética y su bajo impacto ambiental, es inevitable que el proyecto modifique los biomas comprometiendo especies en peligro que habitan la región. Una de estas especies es la Lagartija Leonesa, que ya ha sido reconocida por las autoridades internacionales como especie en peligro de extinción.
¿Qué pesará más en la decisión de las autoridades?
Al igual que el faraónico proyecto fotovoltaico de Elon Musk, será complejo para cualquier autoridad decidirse a comprometer tesoros históricos y especies en peligro para producir electricidad. Sin embargo, los principales promotores del proyecto son los alcaldes de las localidades implicadas, que esperan impulsar sus municipios gracias a los puestos de trabajo que surgirían.











