Para poder crear tecnología y elementos de distintas clases es necesario hacer múltiples pruebas las que pueden durar mucho tiempo antes de lograr llegar a algún resultado que sea tangible y, aun así, la mayoría de las veces terminan en fracasos. Pero, en otras oportunidades, finalizan en éxitos rotundos como el que China alcanzó después de haberlo intentado durante 50 años y al que España y el mundo deben atender.
China: una potencia en la creación de nuevas tecnologías
A partir de los años 80 del siglo pasado, China ha sido un país que poco a poco ha ido emergiendo como una potencia mundial en el desarrollo de diversas industrias, de hecho, en lo que va del siglo XXI es uno de los líderes en la revolución tecnológica que estamos viviendo. Cada día nos vemos sorprendidos por avances y descubrimientos que tan solo unos años antes eran un sueño de ciencia ficción.
Esto se debe a una gran ambición y deseo de los científicos del país asiático en hallar nuevos inventos, pero también otros materiales que puedan ser utilizados en sus industrias que sirvan para la creación de equipos de manera sostenible y, sobre todo, amigable con el medioambiente. Esto se debe a la capacidad del gigante asiático, pero especialmente a la paciencia para hacer pruebas a muy largo plazo.
La última creación del país asiático: un hito en el que España y el resto del mundo deben fijarse
Un grupo de científicos que investiga para la Universidad de Jilin en China, el cual está encabezado por el destacado académico Dr. Mingguang Yao, ha logrado algo increíble: desarrollar un método para la creación diamante hexagonal llamado lonsdaleita a partir de grafito común, esto despues después de más de 50 años de pruebas. Sometió a este mineral a una presión sobre las 300 000 atmósferas, que son unos 30 gigapascales a una temperatura de 1100 °C.
Lo que permitió un reacomodo en el carbono, a nivel atómico, para llevarlo a una estructura con forma hexagonal, evitando que la estructura física interna de los átomos pueda llegar a tomar otras formas comunes (resulta tan revolucionario como el uso de este material para alimentar los reactores nucleares en el país asiático). Debes saber que la lonsdaleita es un elemento que se consiguió en meteoritos.
Los cuales han caído en la Tierra y es una variante del carbono cuyos átomos están organizados en formas semejantes a un hexágono que resulta más duro que el diamante. En el año 1967 fue observada por vez primera en los restos de un meteorito que impactó sobre la corteza terrestre y desde entonces este material ha sido estudiado a fin de saber si podría ser replicado tomando en cuenta su teórica dureza.
La lonsdaleita creada por China posee una dureza que supera en un 40 % la de los diamantes convencionales. Una de sus características más destacadas es su gran estabilidad térmica a temperaturas extremas, pero para lograr este atributo es necesario que durante su fabricación se mantenga una temperatura muy precisa. Por esta razón, los investigadores utilizan las rampas térmicas controladas.
¿Es factible su industrialización para la producción masiva?
Aún no es posible la creación de este material a nivel industrial por las condiciones tan extremas, que deben ser constantes, de temperatura y presión. Es por ello que los científicos de China están trabajando en encontrar aditivos y catalizadores, del tipo químico, que permitan hacer más viables y disminuir las necesidades energéticas para el sintetizado para poder elaborar este material a bajo costo.
Como conclusión, luego de más de 50 años de estudios y pruebas China por fin dio con el proceso correcto para la síntesis de la lonsdaleita (lo que es tan importante como este yacimiento de energía para 60 000 años encontrado por el gigante asiático). Este material destaca porque es un 40 % más duro que el diamante natural y tiene una gran estabilidad térmica, incluso a temperaturas muy altas.
