El mundo de este siglo está en una búsqueda continua de fuentes energéticas que sean amigables con el medio ambiente y que no emitan CO2. Entre todos los combustibles descubiertos, pareciera que el hidrógeno es el más adecuado por ser sostenible y producir como desecho vapor de agua.
En España y Europa estamos produciendo hidrógeno azul y verde
Lo primero que debemos tener claro es que este es un gas incoloro y, de hecho, no es detectable a simple vista. Pero, ¿a qué se refieren los diferentes colores con que se habla de este elemento? En este sentido, se trata del método de producción o extracción del mismo.
De esta forma, la industria energética utiliza diferentes colores como clave indicadora del origen del gas. En toda Europa se está produciendo el verde y el azul, que es la forma más ecológica y sostenible. Pero, ¿cómo se fabrica el hidrógeno morado? y ¿cuales son sus ventajas y desventajas?
El gas morado: en qué consiste y el país que lo produce
En EEUU se está produciendo una variedad muy poco común: el hidrógeno morado, que para algunos viene del siglo XXII por ofrecer una eficiencia de más del 50%, que es mayor que la del verde. Y aunque es menor que para el caso del azul, no genera CO2, lo que sí sucede con este.
Asimismo, se necesita menos energía por unidad de gas que se produzca, comparado con otros métodos. Este hidrógeno morado o violeta es una combinación del rojo y el rosa, puesto que se genera de una mezcla de los métodos de electrólisis y con termólisis que necesitan energía.
La energía necesaria para ambos procesos se obtiene de las grandes plantas nucleares. A este procedimiento también se le llama electrólisis termoquímica. Este método para producir este elemento usando reactores nucleares surgió en los EEUU en los años 90.
Pero no es hasta la última década que se ha masificado, debido a que su origen es limpio y no produce emisiones de gases. Por otra parte, utiliza el calor con el cual se genera otro tipo de energía, como la eléctrica, para la descomposición del agua en sus moléculas fundamentales..
Sin embargo, esta forma de producción ha sido motivo de acalorados debates sobre el concepto de amigabilidad con el medio ambiente. Su producción en España es ilegal por la desnuclearización que se está llevando a cabo. Por lo que el hidrógeno morado no es una solución sostenible.
Otro punto en contra es que los expertos mantienen que por más medidas de seguridad que se tenga en las centrales nucleares, siempre representarán un peligro latente. Para ello ponen como ejemplo los desastres de Chernóbil, Three Mile Island y Fukushima, entre otros.
La solución en Europa: el azul y el verde
En Europa se ha optado por el hidrógeno verde y el azul, que aunque sus procesos son menos eficientes que el violeta, no son tan peligrosos como el nuclear. El gas azul, que se produce a partir del gas natural reformado o tratado, tiene una eficiencia que va desde el 60 al 85%.
Aunque tiene la gran desventaja de emitir carbono. Mientras que este elemento de color verde, que se genera a través de un proceso conocido como electrólisis, aunque tiene una eficiencia de hasta el 40%, es ecológico, sostenible y sin emisiones, pero es muy costoso producirlo con la tecnología actual.
En resumen, estamos claros de que este elemento morado nunca será una solución sostenible. Si bien Europa aún está desarrollando la tecnología para obtener hidrógeno azul y verde, ha habido buenos avances para hacer que sean mejores que el elemento rojo obtenido por método nuclear.











