Existen ciertos eventos cuya naturaleza no está claramente definida, y que podrían causar serios inconvenientes a terceros, aun cuando no se tenga la intención de hacerlo, es inevitable y por eso hay que tomar medidas preventivas. Este es un caso de ese tipo, porque parece un simple fenómeno, pero en España hablan de robo, es algo que podría ser la causa de un enorme problema entre los interesados.
La intensa actividad humana agota a la naturaleza
En la vida actual, la actividad humana es cada vez más amplia y abarca una gran cantidad de áreas, debido al crecimiento incesante de la población, y a que esto produce requerimientos cada vez mayores de diferentes clases de recursos. Eso ha llegado a afectar en gran medida a los diferentes elementos naturales que son empleados, a veces de forma excesiva, para poder realizar una amplia variedad de labores.
Y es por lo que hoy en día resulta evidente que muchas de las riquezas naturales se encuentran en riesgo de desaparecer por completo, porque es imposible que puedan reponerse a la misma velocidad en que se lleva a cabo esa explotación intensa y constante. Eso es exactamente lo que ocurre con esto que parece un fenómeno, pero en España hablan de robo, y que podría llegar a ser un enorme problema.
Un extraño fenómeno que genera controversias
La energía obtenida a partir de la fuerza del viento se ha convertido en parte fundamental del mix energético de muchos países, incluyendo a España. Sin embargo, los científicos han detectado un extraño fenómeno que podría generar grandes controversias, se trata del efecto estela, que consiste en que una cierta parte de la velocidad del viento se desvanece después de que pasa a través de los aerogeneradores.
Algunas veces, las consecuencias de esta situación se pueden prolongar hasta una distancia superior a los 100 km después de atravesar un parque eólico, sobre todo si es de grandes dimensiones compuesto por muchas turbinas. Cuando dos de estas instalaciones se encuentran muy cerca, la que está de cara al viento no tiene problemas, pero la que está detrás puede tener una caída del 10% en su capacidad de generación.
Este es un problema que está creciendo en la misma medida en que aumenta el montaje de nuevos establecimientos energéticos de esta clase en los mares, y es más notorio en Europa. Esto ya está causando controversias y demandas entre las diversas empresas que están desarrollando sus proyectos en zonas cercanas (de hecho, se afirma que provocara un conflicto entre los diferentes países).
Esto se ha visto en el Reino Unido, pero a los expertos les preocupa que estos conflictos ocurran entre países vecinos, porque el fenómeno del robo del viento, como le dicen popularmente al efecto estela, puede complicar la productividad de los parques eólicos. Y no solo eso, sino que también puede retrasar el logro de los objetivos propuestos para la transición energética por parte de los miembros de la UE.
Los expertos buscan soluciones al robo del viento
El Reino Unido ha sido el país más afectado por el fenómeno conocido como el robo del viento, y para solucionarlo están evaluando de forma precisa cómo actúa y, sobre todo, las mejores soluciones para prevenirlo. Por eso están creando simuladores para comprender las diversas interacciones entre los parques de aerogeneradores, y contribuir de esa forma a crear normas claras para su regulación.
En conclusión, el crecimiento de los parques eólicos ha evidenciado un nuevo problema causado por el efecto estela, que consiste en la pérdida de velocidad del viento cuando pasa a través de los aerogeneradores. Este fenómeno conocido como el robo de viento ha generado controversias en el Reino Unido (que ya se ha alejado de Europa por otra causa), por lo que los expertos buscan crear normas claras para su regulación.
