La administración de una nación no es un trabajo sencillo, pues requiere de conocimientos profundos en diferentes áreas que tendrán que estar a cargo de expertos para optimizar sus recursos. Por otro lado, también resulta de gran utilidad la experiencia ajena para aprovechar su saber, así que hay algo que estamos haciendo, bien porque Francia admite que mira a España cuando piensa en el futuro.
Se puede mejorar la gestión aprovechando la experiencia ajena
Suele ser bastante frecuente que los habitantes de un país sean críticos con muchos de los hechos que ocurren en diferentes partes de la administración, así como también que algunas de las normas y medidas emanadas de allí sean vistas con cierto recelo. Sin embargo, también es importante cultivar la capacidad de reconocer lo positivo y buscar la forma de apoyarlo, pues no hay nada absolutamente bueno o malo.
Ahora bien, quienes reciben responsabilidades de alto nivel en alguna posición relevante, harían bien en mirar más allá de sus fronteras y tomar lo mejor de la experiencia de sus vecinos con la finalidad de aprovechar esos conocimientos para alcanzar un mejor desarrollo en su propia gestión. En ese sentido, sabemos que algo estamos haciendo bien, porque Francia admite que mira a España cuando piensa en el futuro.
Francia ve su futuro en el presente de España
El adecuado manejo de los recursos hídricos es esencial para cualquier país, sobre todo en esta época de cambio climático. De acuerdo con el criterio de la reconocida hidrogeóloga francesa, Dominique Darmendrail, España está llevando a cabo una excelente gestión de sus aguas en dos aspectos claves que podrían aportar grandes beneficios a su país si este decide tomarlas y adaptarlas a sus necesidades.
Uno de ellos es el aprovechamiento de las aguas residuales, pues en lugar de simplemente regresarlas al medio ambiente, los españoles las someten a tratamientos especiales en las plantas de purificación para poder usarlas posteriormente para regar sus cultivos. Mientras que en Francia hay algunas regiones como Orleans, donde las autoridades prohibieron la irrigación de las flores con dichas aguas residuales.
Eso lo hicieron argumentando que podría convertirse en un problema de salud pública, aun cuando se sabe que el riesgo es mínimo (otro punto es que Francia tiene dudas sobre sus relaciones con la península). El otro aspecto clave que la experta reconoce como muy positivo en la gestión de las aguas es que la administración de este recurso se realiza a través de las propias cuencas hidrográficas porque así resulta más sencillo.
De esa manera se evitan los obstáculos relativos al intercambio de información, facilitando así la toma de decisiones necesarias para el manejo adecuado de las fuentes hidrológicas. España cuenta con más experiencia en ese tipo de gestión porque ya ha sufrido la escasez de agua, y su disponibilidad de este recurso es menor, mientras que Francia puede ver en esa situación un posible reflejo de su futuro.
Los recursos hídricos de Francia se están reduciendo
La hidrogeóloga Dominique Darmendrail señala que hay cuatro cuestiones fundamentales que provocarán problemas con el agua en Europa, y esas son la contaminación, su administración, el cambio climático y su disponibilidad. Francia no escapa a esta realidad, y aunque cuenta con mayores recursos hídricos, ya comienzan a notar cómo estos se están reduciendo, así que podrían aprender de la experiencia de España.
Concluyendo, la hidrogeóloga francesa Dominique Darmendrail indicó que España está llevando a cabo una excelente gestión de sus aguas en dos aspectos claves, el uso de aguas residuales para el riego y su administración directamente desde las propias cuencas hidrográficas. Y aunque Francia cuenta con más recursos hídricos, estos se están reduciendo (aunque los franceses están instalando parques subacuáticos).
