A través de un proyecto denominado Neom, los saudíes se han propuesto llevar a su país a la vanguardia del turismo mundial y de la tecnología, sin embargo, aunque en el papel todo parece perfecto y absolutamente progresista, se han tropezado con la realidad. Ahora el fraude The Line ha quedado al descubierto, todo esto a causa de su peculiar forma, así como también por el error irreparable de Arabia Saudí.
El proyecto Neom busca diversificar la economía
Desde la primera mitad del siglo pasado, la economía saudí ha sido totalmente dependiente de la producción petrolera, puesto que es el mayor exportador de ese producto a nivel mundial, y debido a esta bonanza, sus líderes se han caracterizado por vivir en medio del lujo y el derroche durante años. Pero debido a los estragos del cambio climático, muchos países están disminuyendo su consumo de petróleo.
Evidentemente, en el mediano o largo plazo esto disminuirá drásticamente sus ingresos, por esta razón están tratando de diversificar su economía, y para hacerlo elaboraron el proyecto Neom 2030 con la finalidad de transformar a The Line en el centro del turismo y las nuevas tecnologías. Pero esto es un fraude que ya quedó al descubierto, debido a su peculiar forma y por el error irreparable de Arabia Saudí.
The Line se vio obligado a reducir sus dimensiones
The Line es una ciudad lineal que estará en pleno desierto de Arabia Saudita, y que constituye el elemento central del proyecto Neom, cuya finalidad es conducir a ese país al primer lugar como destino turístico a nivel mundial. Pero lo que se esperaba que fuera una ciudad futurista de primera categoría ahora es un fraude, y el paso del tiempo ha ido desvelando los diversos errores que estaban ocultos.
Este lugar fue planeado para no requerir el uso de vehículos, porque contaría con trenes rápidos que realizarían los traslados a través de sus 200 metros de anchura y sus 170 km de longitud. Pero la reducción de los precios del petróleo ha disminuido la cantidad de dinero disponible (es tan enorme que posee el 20 % de la producción del planeta), así que para 2030, estarán construidos unos 2.4 km de la totalidad de lo proyectado.
Eso ha significado la eliminación de varias estructuras que iban a contribuir a hacer de este uno de los lugares más modernos y sostenibles del planeta, como el caso de una planta desalinizadora que funcionaría con energías renovables. El tiempo está revelando gradualmente todos los secretos que se ocultaban detrás de los retrasos en la construcción de esta ciudad, que se ha convertido en un inmenso fraude.
Un fraude amenaza a las poblaciones vecinas
El proyecto Neom busca ampliar las fuentes económicas de Arabia Saudita, y The Line es una parte fundamental del mismo, porque constituye una demostración fehaciente de que allí son capaces de lograr lo que parecía imposible. Pero la vida real se impone, y a los problemas presupuestarios y estructurales, hay que agregarles la destrucción de varias poblaciones que se encontraban cerca de la construcción.
Han desalojado a miles de personas de los lugares que habían sido su hogar por varias generaciones e incluso las autoridades han usado la fuerza para hacerlo, hasta ahora se sabe que al menos a uno de ellos, Abdul Rahim al-Huwaiti, lo mataron, y otros 47 fueron detenidos por resistirse al desalojo. The Line fue creada para mejorar la situación del país, pero el resultado ha sido un fraude peligroso para su gente.
Concluyendo, The Line se ha convertido en un fraude de inmensas proporciones, principalmente porque se han visto obligados a recortar el presupuesto debido a que los ingresos de Arabia Saudita han resultado afectados por la disminución de los precios petroleros (a pesar de que Corea del Sur acudió en su rescate). Pero lo más grave es que han desalojado a miles de personas para poder realizar esa construcción.
