En el sector construcción continuamente se están presentando nuevas innovaciones, sobre todo en lo referido a los materiales aislantes, que son los más usados por ser quienes nos defienden de los elementos extremos. Te traemos este que es obtenido a partir de los girasoles y hará que le digas adiós a la calefacción.
Un aislante diseñado por un equipo de estudiantes
Un grupo compuesto por seis estudiantes de la Facultad de Ingeniería Civil de la Universidad Nacional del Sur, en Argentina, ha creado un aislante térmico y acústico utilizando como materia prima el tallo del girasol, que es un residuo desechable que se produce en el procesado de esta oleaginosa.
El producto ha sido bautizado como Giracrete y es una alternativa sostenible, amigable con el medio ambiente y muy económica que puede sustituir los materiales de construcción ligeros convencionales que protegen contra el frío de invierno. Otro punto interesante es que su fabricación es muy sencilla.
¿En qué consiste este material de construcción ecológico?
La fabricación del material aislante Giracrete está inspirada en técnicas de producción de la clase de celulosa y del hormigón de cáñamo. Para ello, los creadores investigaron sobre la estructura del tallo de girasol, el cual no tiene ningún uso en la industria. Luego procedieron a triturarlo y licuarlo.
En un proceso similar al seguido con la celulosa, posteriormente se mezcló con aglomerantes, cal, cemento y otros aditivos para finalmente filtrar el producto, separándolo del material grueso e irregular. Con esta pasta se hacen placas para ser instaladas sobre muros, paredes o cielorrasos como una segunda piel.
Y de esta forma, dar protección térmica, ya que posee un índice de transmisión de calor muy bajo por lo que es lento para el cambio de temperatura. Así que conserva el calor durante más tiempo. De manera que disminuye el tiempo necesario de encendido de la calefacción, reduciendo la facturación.
Por energía eléctrica o gas. Es una solución para la climatización a bajo costo que reduce la emisión de CO2 asociada a la industria de la construcción, a la vez que ahorra en el uso de energía no renovable y permite dar una segunda vida a desechos vegetales (como este producto que es para fachadas).
Con respecto a esta materia prima debes saber que, anualmente en Argentina, se producen un aproximado de 3,4 millones de toneladas métricas de girasol. Donde las semillas y las flores son muy apreciadas por lo que tienen múltiples usos en las industrias de la alimentación, cosmetológica, entre otras.
Pero, por el contrario, los tallos que pueden llegar a medir hasta tres metros de longitud no tienen ningún uso comercial ni alimentario. Por esta razón se genera un gran volumen de desechos de este vegetal en la industria agrícola, los cuales son materia prima para la elaboración de este aislante.
Este material hecho de girasoles ha ganado muchos premios
Recién terminado este aislante, se presentó en el concurso internacional avalado por el Grupo de Inventores de Occidente, que se encuentra en México, alcanzando el primer lugar en la categoría referente a materiales para la construcción sostenible. Posteriormente, fue nominado para representar a Argentina.
En el evento Premios Innovation Project 2024 en el que son grandes favoritos. El equipo de inventores ha expresado gran satisfacción por los logros alcanzados y ahora están creando nuevas combinaciones que incrementen la durabilidad del producto, hacerlo ignífugo y retardante de la llama.
Concluyendo, este aislante que se hace a partir del tallo de los girasoles es sostenible, ecológico y en su proceso de elaboración no se emiten gases de efecto invernadero. Por lo que le dirás adiós a la calefacción usando estas placas, al igual que con este que ahorra un 90 % de energía y de seguro te sorprenderá.
