Europa es un continente exquisito, y no solo por su cultura tan rica y variada, sino porque aún esconde bellezas naturales poco conocidas. En este caso te presentaremos una isla que nada tiene que envidiarle a Hawái, con lagos inmensos que ofrecen unas tonalidades verdes inolvidables, es una isla hueca y poco conocida.
Un paraíso poco conocido que guarda muchos secretos y encantos naturales
Mucha gente se sorprenderá cuando sepa que, en Portugal, existe un lugar tan misterioso y exótico como Hawái, y que está al alcance cualquiera que tome un vuelo desde Lisboa con una duración aproximada de dos horas y media. Se trata de las Azores, y específicamente de la isla San Miguel, el tesoro mejor guardado del Atlántico.
Es un sitio que ofrece una gran diversidad de parajes para visitar, donde se puede disfrutar de su hermosa y antigua capital, Ponta Delgada, que posee una gastronomía deliciosa. En tanto que sus paisajes naturales son imperdibles, y tiene la ventaja de que todo está cerca, y si vas a un lugar, en el camino habrá mucho para ver.
La actividad volcánica dio origen a uno de los lugares más hermosos y exóticos de Portugal
Las Azores son un conjunto de nueve islas, entre las cuales es destaca San Miguel, que debe su origen a una fuerte erupción volcánica, lo que dio a ese lugar único en el planeta. Y aunque pareciera que se trata de un destino muy remoto, solo hay que tomar un vuelo desde la capital de Portugal para llegar allí.
En esta isla, de apenas unos 750 Kilómetros cuadrados, hay muchísimos lugares para visitar y maravillarse. En primer lugar, se encuentra la ciudad que puede ser considerada como la capital económica de la región, se trata de Ponta Delgada, una ciudad antigua en la que se mezclan una arquitectura típica.
Con el encanto de una ciudad turística moderna, donde se puede disfrutar al aire libre de las delicias que ofrecen sus cómodos y cálidos cafés. Aunque es pequeña, este lugar cuenta con una actividad comercial muy activa, una gastronomía deliciosa y variada, en la que no pueden faltar los frutos del mar, y los cozidos das furnas.
Ese plato se cocina al calor que guardan sus suelos volcánicos, y es lo más típico. En cuanto a la naturaleza, pareciera que esta región está hueca, pues los lagos más hermosos están ubicados en los cráteres de volcanes inactivos, y uno de los más conocidos es el Lagoa das Sete Cidades, que muestra dos colores.
Hay que caminar y tomarse el tiempo necesario para disfrutar de la naturaleza en la isla de San Miguel
El Lagoa do fogo es el que está ubicado a mayor altura en la isla San miguel. Se encuentra en el fondo de una caldera de volcán, sus orillas poseen piedra pómez, lo que les brinda el aspecto de una playa exótica, está rodeado de una hermosa vegetación, y es fácil llegar en coche, pero hay que caminar por los miradores.
Porque es la mejor manera de disfrutar de una vista panorámica de este lago, otros lugares que es casi obligatorio visitar son sus piscinas de aguas termales, entre las cuales están las de Caldeira Velha, donde imposible evitar la tentación de darse una zambullida, y relajarse contemplando el entorno verde que la rodea.
Se puede concluir que Europa tiene mucho que ofrecer quienes deseen aventurarse por su territorio. El mejor ejemplo es la isla San Miguel, que está al mismo nivel de Hawái en cuanto a bellezas naturales, como sus lagos infinitos de colores variados, aguas termales, las playas, y su gastronomía única hecha al calor de la tierra.








