España es el cuarto territorio más grande Europa, compuesto por una gran cantidad de islas desparramadas por las aguas del Mar Mediterráneo que extienden la esfera de influencia ibérica más allá de la península. A cientos de kilómetros de nuestras tierras, sobre la línea de costa de Marruecos, se encuentra el archipiélago de Chafarinas, foco de disputas históricas con el Estado marroquí.
El archipiélago de Chafarinas: 8 islas deshabitadas que Marruecos quiere a toda costa
El archipiélago de Chafarinas está compuesto por una serie de islas, islotes, peñones y formaciones rocosas prácticamente deshabitados y forma parte de los puntos de soberanía españoles en la costa marroquí. El más importante es el Peñón de Vélez de la Gomera, donde se produjo, en 2022, un acto de protesta por parte de nacionalistas que reclamaban derechos soberanos de Marruecos.
El evento no llegó a más y se resolvió por medio de la diplomacia, reconociendo la legitimidad de la presencia española en el Peñón, pero el archipiélago sigue siendo un tema sensible para las relaciones internacionales con el país vecino.
El archipiélago de Chafarinas se encuentra a 3,52 kilómetros de la costa de Marruecos y está conformado por las islas del Congreso, Isabel II y del Rey Francisco. Estas tierras, además de como puntos clave para la soberanía ultramarina de España, tienen valor como coto de caza y para prospecciones arqueológicas. También cuenta con una importante variedad de fauna y flora tanto terrestres como marinas.
Otro punto conflictivo: el archipiélago de Alhucemas
Este archipiélago se ubica a 280 kilómetros de la Península Ibérica y está conformado por los islotes de Mar y Tierra y el Peñón de Alhucemas. Su superficie alcanza apenas poco más de un kilómetro cuadrado y sólo está habitado por una escasa guarnición militar que custodia la soberanía española en las formaciones rocosas y que es reemplazada periódicamente.
En algún momento de la historia llegó a establecerse una población civil de unas 350 personas que reforzaban la presencia ibérica en la costa del norte africano y se dedicaban al comercio. Las escasas edificaciones que se pueden encontrar incluyen, además de las modestas fortificaciones del Peñón de Vélez de la Gomera, un faro, una iglesia y dependencias para el personal administrativo y militar.
Probablemente el punto de mayor valor estratégico y que más reclamos ha generado por parte de Marruecos es la Isla del Perejil, un islote deshabitado en el estrecho de Gibraltar que guarda la salida al Océano Atlántico. Estos territorios se encuentran bajo la autoridad administrativa de la Comandancia General de Melilla, aunque no forman parte del territorio de esta Comunidad Autónoma.
Una historia larga y compleja: ¿Qué hay en estas islas que todos quieren?
Los principales recursos de estas islas son su valor estratégico por el paso de naves mercantes desde los puertos mediterráneos hacia las aguas del Atlántico. Existen recursos pesqueros y, potencialmente, yacimientos de hidrocarburos bajo sus aguas.
El Peñón de Vélez de la Gomera, en particular, es un punto clave para la presencia de España en estas costas y guarda una importante salida al Mediterráneo. La historia de esta masa de tierra, que desde un importante terremoto ocurrido en 1930 está unido a la costa africana, está plagada de ataques por parte de tropas y piratas bereberes que ocuparon el sitio por breves periodos.
El tesoro español más valioso: las islas que destacan nuestra identidad en todo el mundo
Es importante conocer toda la variedad de tierras e historias que han construido nuestra identidad a lo largo de los siglos. Aunque estos islotes y peñones no sean tan atractivos como los paraísos turísticos de las Islas Canarias o las Baleares, son igual de importantes. Lo mismo ocurre con otra isla que atrae turistas no por sus playas, sino por sus paisajes volcánicos que remiten a planetas hostiles.
