Los ladrillos podrían desaparecer para siempre ante una creación hecha a base de materiales reciclados, concretamente tapas de bebidas gaseosas recicladas. Una familia de Tigre (Buenos Aires, Argentina) diseñó ladrillos de plástico reciclado para construir casas. La idea surgió hace años para ayudar a las personas de bajos recursos. Se trata de un proyecto sencillo, pero innovador, un ladrillo realizado a partir de tapones de botellas de plástico, fácil de montar. Encima contribuye a la reducción de basura plástica. ¿Podríamos estar ante el fin de los ladrillos convencionales?
¿Cómo es el nuevo método a base de reciclados que deja KO a los ladrillos?
EasyBrick es un ladrillo fabricado a base de residuo plástico reciclado, a partir de 330 tapones de gaseosa reciclados. Hablamos de ladrillos que pesan entre 900 gramos y 1 kilo. Sus paredes están conformadas por tres capas de aire, convirtiendo este material es un aislante totalmente térmico. Agregan retardante de llama en el proceso de fabricación, algo que lo convierte en algo totalmente ignífugo.
La principal ventaja de estos reciclados es la rapidez de obra. Es posible construir un muro de 3 metros en dos o tres horas, de acuerdo a la destreza que manifieste el usuario con estos ladrillos. No necesita una mano de obra especializada para el montaje ni materiales húmedos. Tomando como referencia una platea absolutamente lisa empiezan a superponerse ladrillos, como si se tratara de un montaje LEGO y deja unos pelos para colar ahí el hormigón. Así se van creando las columnas.
La producción del ladrillo nace a partir del PP reciclado, pellets de plástico que ingresan en la tolva, se calienta y derrite a unos 200 grados, aproximadamente, pasa el tornillo. Este es el que empuja el material y termina con un ladrillo armado.
Para crear 55 metros cuadrados el tiempo de espera es un día. Otro de sus beneficios es que puede fabricarse a nivel local, por lo que tampoco es necesaria una maquinaria especializada. De hecho, la materia prima se encuentra en cualquier lugar del mundo.
Todo lo que necesitas saber sobre el ladrillo hecho a base de reciclados
Es un material liviano. Tiene un peso bajo y un alto comportamiento estructural. Perfectos para obras rápida. En consecuencias, los costes de la obra se reducen considerablemente.
- Reciclado. No existe materia prima virgen en su fabricación.
- Larga durabilidad. Su vida útil es de 100 años.
- Adaptable. Presenta un sistema muy versátil, capaz de adaptarse a diferentes proyectos de construcción seca y combinable con construcción tradicional.
- Es un producto impermeable. Su porcentaje de absorción de agua es del 0%.
- Atérmico. Cuenta con una baja conductividad térmica, que se ve potenciada por tres cámaras de aire que forman el diseño del bloque.
- Acústico. Dispone de tres cámaras de aire que tienen un espectro acústico superior al de otros sistemas.
- Precisión. La fabricación del ladrillo se hace por inyección. Como resultado se consigue que el artículo adquiera estabilidad dimensional.
- Autogestionable. El sistema de encastre entre bloques es simple y garantiza que la construcción de las hiladas del muro tenga una escuadra y plomo óptimos.
¿Dónde se puede conseguir EasyBrick?
Tienen una página web (easy-brick.com) en la que explican en qué consiste este sistema de construcción y los productos que comercializan: ladrillo estándar, medio ladrillo, ladrillo acanalado y teja tipo colonial.
“Para entender el concepto: en Argentina se desechan más de 12 millones de tapitas de gaseosa por día. Con esa cantidad de plástico, EasyBrick puede fabricar unos 36 mil ladrillos diarios. Algo así como 15 viviendas tipo. Los ladrillos, de peso reducido y excelente capacidad de aislación térmica, se encastran entre sí como si fueran piezas de Lego. Así de simple”, explican desde la compañía.













