El lapso para hacer la declaración del impuesto está en pleno desarrollo, y esto trae cierta preocupación acerca de cuánto dinero se llevará Hacienda, si se conservaron todas las facturas, y además hay que tener presente los cambios en las normativas. Pero también es importante estar muy pendientes de las deducciones que tal vez te estás perdiendo y que pueden llegar hasta 600 euros en la Renta.
Hay que familiarizarse con los requisitos de la Renta
El periodo durante el cual se cumple con la obligación de realizar el pago de los tributos parece ser lo suficientemente prolongado como para tomar las cosas con calma y dejarlo para cualquier momento del futuro, que suele ser lo que ocurre con los trámites que resultan complicados. El inconveniente es que, si se deja para el último momento, habrá que hacerlo de forma rápida, y se podrían obviar ciertos detalles.
Pues, además de reunir los soportes y facturas correspondientes, también es importante familiarizarse con los requisitos para presentar correctamente la declaración. Otro de los factores relevantes para tener en cuenta es el conocimiento de las diversas deducciones que están disponibles, pues por falta de información te las podrías estar perdiendo, y eso podría significar hasta 600 euros en la Renta.
Las Comunidades que ofrecen deducciones diferentes a sus habitantes
El lapso para cumplir con la declaración del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) ya está corriendo, por lo cual es necesario buscar las facturas y cualquier otro tipo de soporte que se requiera. También hay que conocer la normativa actual, para adaptarse a los cambios e incluir todas las deducciones que permitan reducir el monto del tributo, y que presentan ciertas diferencias entre algunas regiones.
Las Comunidades Autónomas ofrecen una mejor calidad de vida a sus habitantes, lo cual se evidencia hasta en el pago de los tributos (aunque Hacienda ha anunciado modificaciones para este 2025). Y es que, en dos de ellas, específicamente en la Comunidad Valenciana y en La Rioja, los gastos generados por practicar actividades deportivas pueden ser utilizados para deducir un monto máximo de 300 euros.
En las dos comunidades se exigen las facturas y soportes correspondientes, y deducen el 30% de los pagos realizados por la afiliación a instituciones deportivas o a entrenadores personales. En la Comunidad Valenciana también se incluye el monto de la compra de los implementos necesarios para la práctica deportiva, y el deducible máximo es de 150 euros, aunque existen algunas excepciones especiales.
Si el contribuyente padece una discapacidad del 33% o más, y es mayor de 65 años, se deduce el 50% de los gastos, y se llegará al 100% con discapacidades que superen el 65% y a los 75 años. Mientras que, en La Rioja, las deducciones sobre los diversos gastos deportivos tienen un máximo de 300 euros, pero alcanzan el 100% para discapacidades mayores al 33% y también para quienes ya han cumplido los 65 años.
Verificar la información del IRPF puede generar un reembolso
Una buena noticia para quienes perciban salarios entre 22 000 y 35 000 euros por año es que existe una normativa desde el año 2022 que les permite realizar un ajuste de su carga tributaria. Esto significa que podrían recibir un reembolso por un monto comprendido entre los 400 y los 900 euros, así que el contribuyente debe revisar sus retenciones anuales e incluir todas las deducciones posibles para recibirlo.
En definitiva, se pueden incluir todas las deducciones posibles, e incluso se puede llegar a recibir un reembolso importante (como este caso en que Hacienda está obligada a devolver estas cantidades de dinero cobradas indebidamente). Y quienes residen en ciertas Comunidades Autónomas, pueden encontrarse con la agradable sorpresa de que sus gastos deportivos también pueden ser usados para reducir tributos.