En el mundo existen diferentes clases de fuentes energéticas, unas más utilizadas que otras, pero todas con un objetivo común, ser capaces de generar empleando recursos naturales renovables sin destruirlos en el proceso. En este sentido, se ha calculado que una de ellas tiene suficiente energía como para alimentar a dos planetas Tierra con una demanda similar. Observemos esta más de cerca.
Las fuentes renovables: hacia el protagonismo en el mundo
Este tipo de fuentes energéticas está conformado por aquellas que se obtienen a partir de recursos naturales que se regeneran de forma continua. Al contrario de la energía de origen fósil, estas son prácticamente inagotables, de producción predecible, no generan emisiones de gases de efecto invernadero y son amigables con el medio ambiente aunque algunas son de clase estacional o discontinua.
Con esto queremos decir que hay períodos donde no generan, ejemplo de esto es la solar y la eólica, que dependen de factores climáticos. Pero, por otra parte, tienen la ventaja de que, una vez hecha la inversión inicial de equipo e instalaciones, durante muchos años proporcionarán electricidad gratuita con una mínima inversión en mantenimiento preventivo y con una vida útil a muy largo plazo.
Una fuente de energía que aporta en grande
El mar es una gran fuente de energía de diferentes formas como la que aprovecha las corrientes marinas para mover turbinas, la maremotérmica que usa las diferencias de temperaturas para producir electricidad, la mareomotriz que emplea las mareas, la de gradiente salino que se basa en concentración de sal y la undimotriz que se vale de las fuerzas de las olas para generar a través de diversos dispositivos.
Esta última es la más desarrollada y utilizada en la actualidad (incluso le está haciendo competencia a las grandes plantas solares en el mar). La tecnología que aprovecha esta fuente está a la vanguardia porque se ha calculado que esta última tiene un potencial de hasta 30 000 TWh, es decir, que con ella se pueden alimentar dos planetas como la Tierra, puesto que es el doble del consumo mundial.
Ahora, la undimotriz cuenta con gran preferencia en todo el mundo por ser considerada la más eficiente y que es más adaptable a las diversas geografías de los países que tengan costa, puesto que el oleaje es constante aun en costas muy bajas. Esto demuestra la diferencia con respecto a otros fenómenos marítimos que requieren profundidades mayores a 100 metros para ser efectivos, como las mareas y las diferencias de temperaturas.
Adicionalmente, la energía undimotriz, de acuerdo a los cálculos económicos hechos por los expertos, resulta ser mucho más rentable si comparamos la generación en kWh con la inversión realizada en equipos, materiales y mantenimiento. Por lo que desde ya es conveniente que todos los países se pongan de acuerdo en cómo ir pescando esta forma de electricidad que les dará mayor independencia energética.
Los proyectos con la undimotriz en España
El principal proyecto en España con esta energía queda en Motrico que es una región que pertenece al País Vasco. Esta planta de olas está operativa desde el año 2011, a partir de esta fecha ha producido alrededor de 3 GWh y funciona con una especie de pistón que las olas constantemente empujan, haciendo que el aire mueva una turbina conectada a un generador de electricidad.
En definitiva, entre las fuentes energéticas del mar hay una que se destaca por su versatilidad y adaptabilidad a todas las geografías de los países (lo cual actúa como estas boyas amarillas descubiertas en Escocia). Se calcula que se podrían generar 30 000 TWh de electricidad con la undimotriz, lo que sería suficiente para alimentar dos planetas, puesto que esta cantidad de energía es el doble de la demanda de la Tierra.