Así como España ya ha tomado medidas para extraer el hidrógeno que posee de forma natural, las naciones ya están trabajando en su aplicación en grandes turbinas capaces de generar electricidad, sustituyendo a los combustibles fósiles. En este sentido, en Alemania se encendió la superturbina que trabaja con 100% hidrógeno y promete despedir definitivamente al gas natural.
Una tecnología nueva utilizada para encender la superturbina
En la veloz carrera por buscar nuevas alternativas al gas natural, no solo para eliminar la huella de carbono si no por su inminente escasez, se necesita mayor creatividad para ponerla a disposición de nuevas tecnologías más sostenibles que ofrezcan prestaciones similares.
Hasta el momento hemos conocido proyectos de turbinas que, en el camino a la transición, podían funcionar perfectamente con un alto porcentaje de hidrógeno en combinación con el gas natural. La nueva creación lanzada por la firma italiana Ansaldo Energía optimiza el sistema conocido.
La iniciativa FLEX4H2 Flexibility for Hydrogen como se ha dado en llamar, ha encendido la superturbina GT36 en Alemania que se destaca por su flexibilidad a la hora de reemplazar el gas natural por hidrógeno a través de un novedoso sistema de combustión.
Esta innovadora tecnología le permite alcanzar elevadas temperaturas para la generación de electricidad sin necesidad de quemar combustible fósil evitando la liberación de más de 2 millones de emisiones.
El proyecto ha recibido la colaboración de la Unión Europea y el gobierno de Suiza mediante un presupuesto de 8,7 millones de euros, que promete alimentar de electricidad a 500.000 viviendas, alcanzando una potencia de 560 megavatios y manteniendo los niveles de emisión bajos.
Bases de la superturbina italiana GT36
La compañía Ansaldo Energía ya venía trabajando con distintas tecnologías híbridas de combustión, utilizando hasta el momento solo un 40% de hidrógeno. Sin embargo, con el objetivo de alcanzar la máxima eficiencia en emisiones, continuó optimizando el proyecto.
La superturbina nueva de clase H es un complejo sistema que optimiza el anterior porque posee dos sistemas complementarios que trabajan en simultáneo sin necesidad de utilizar diluyentes. Su cualidad más destacada es el cambio de gas natural por hidrógeno verde.
En este sentido, puede funcionar al 100% con hidrogeno, sin producir emisiones logrando una densidad y altos valores de temperatura para abastecer a una ciudad completa, demostrando así la eficacia del hidrógeno en el camino a la transición en los próximos años.
Nuevos proyectos surgen por toda Europa
Simultáneamente se están desarrollando sistemas similares a la superturbina de hidrógeno en toda Europa y Norteamérica. Ejemplo de ello es la que se encuentra en la planta de Keadby, Inglaterra, conocida hasta hoy como la más grande del mundo, alcanzando los 300 MV.
Adicionalmente, han cobrado reconocimiento los proyectos de Siemmens y asociados con su reconocida tecnología Hyflexpower, que comenzó operando con el 30% de hidrógeno y hoy ya está produciendo energía con hidrógeno al 100%.
Los científicos participantes del proyecto de Siemens en Francia han afirmado que la superturbina alimentada con hidrógeno enciende una llama con más rapidez y mayor densidad de temperatura que la que provee el gas natural, en tanto que permite mantener los niveles de seguridad más controlados.
Estas innovaciones se destacan no solo por la búsqueda de nuevos recursos energéticos sostenibles sino también porque demuestran que la colaboración entre los países comprometidos con el Pacto Verde y las inversiones privadas pueden unir esfuerzos para un futuro mejor.
En vistas de estas recientes ideas, podemos esperar en un futuro próximo la creación de la superturbina optimizada que pueda ofrecer no solo electricidad, sino también energía térmica. No obstante, el objetivo puede ser más ambicioso, tratando de llegar a abastecer con energía y calor a países enteros. Conoce más proyectos iniciados en España relacionados con el hidrógeno.
