La electrificación del sector movilidad es una de las maneras más efectivas para lograr revertir el cambio climático y su consecuencia más inmediata, el calentamiento global. Por ello, los coches eléctricos han ido ganando gran popularidad. Los fabricantes más emblemáticos de estos vehículos son BYD y Tesla por lo que en Alemania se descuartizó un automóvil de cada marca, dejando al descubierto algo asombroso.
Los coches eléctricos en la actualidad
En los últimos tiempos, la movilidad eléctrica se ha convertido en una forma de transporte cotidiana que ya no es una novedad en las calles. Su popularidad se debe a sus indudables ventajas ambientales, como que no son emisores de gases de efecto invernadero ya que no utilizan combustibles fósiles, puesto que operan con motores que son eléctricos que toman su energía de baterías recargables.
Por otra parte son sostenibles, ecológicos y muy silenciosos. Su masificación no se dio como la mayoría de los gobiernos espera debido a que eran mucho más caros que los convencionales y que la estructura de recarga era insuficiente. Pero en la actualidad, en Alemania y otros países, estos problemas están en vías de resolverse por lo que las ventas han despegado. Entre las marcas más usuales están BYD y Tesla.
Alemania descuartiza un BYD y un Tesla y he aquí lo que consiguieron
El corazón de todo coche eléctrico es su batería y es por ello que un equipo de investigadores del área de Ingeniería de Producción de Componentes de Movilidad Eléctrica en la Universidad RWTH Aachen que se encuentra en Alemania, decidió realizar un estudio comparativo de estos importantes elementos desarmando un vehículo de Tesla y uno de BYD a fin de determinar cuál es mejor entre ambos.
Para esto se refirieron a los modelos BYD Blade (que es la misteriosa batería de sable que dio tanto de qué hablar sobre la tecnología china) y el Tesla 4680. Lo que dejó en shock a todos los que participaron en la investigación, es que los ánodos de ninguna de las baterías contenían silicio, esto porque se considera que este elemento es crucial para aumentar la densidad de energía sin incrementar el volumen.
A pesar de que los dos fabricantes usan baterías de tecnología de iones de litio, las celdas de las BYD están hechas con fosfato de litio y hierro (LFP por sus siglas en inglés), mientras que las de Tesla se componen de níquel, cobalto, óxido de litio y manganeso y es llamada NCM811. Por esta configuración, las celdas de BYD superan en casi ocho veces el tamaño de la celda de Tesla, pero esta última tiene una mayor densidad energética.
En lo que respecta a las soldaduras de electrodos, la empresa norteamericana utiliza solo el método con láser, mientras que los chinos emplean ultrasonidos y láseres. De acuerdo a los científicos de la universidad de Alemania, la tecnología de BYD se centra en el uso de materiales de bajo costo y la eficiencia referida al volumen, mientras que la de Tesla se orienta en el rendimiento y en mantener una alta densidad de energía.
El veredicto ¿cuál es mejor?
Quienes realizaron el estudio en Alemania han manifestado que no se puede hablar de que una tecnología sea mejor que la otra, ya que simplemente son diferentes y depende si se prioriza prestaciones, precio o autonomía. Ya que el diseño de BYD está orientado a la durabilidad y costos accesibles, mientras que Tesla se enfoca en tener un rendimiento y densidad energética muy altos.
Para finalizar, el estudio hecho en Alemania donde han descuartizado el corazón de un coche Tesla y otro BYD, que es la batería (representa el centro de la lucha entre Occidente y Asia), ha dado descubrimientos que dejan en shock a los investigadores . Por otra parte, no se puede dar un claro ganador porque ambas tecnologías están dirigidas a objetivos diferentes, así que la preferencia depende de la prioridad que se tenga.