La Tierra siempre nos depara sorpresas, sobre todo en lo referente a la geología donde hay misterios que se han desvelado en forma casi sorpresiva y abrupta. Algo parecido sucede con la “Tierra de los Dinosaurios” que se encontró a más de 500 kilómetros de profundidad en el Océano Pacífico.
El descubrimiento de un misterio geológico en el Océano Pacífico
Un grupo de científicos de la Universidad de Maryland, ubicada en los Estados Unidos, publicaron en Science Advances, una prestigiosa publicación en línea que trata sobre hallazgos geológicos, que habían efectuado un gran descubrimiento que consistía en un fondo marino de más de 120 millones de años.
Es decir, de cuando los dinosaurios eran los reyes de la Tierra. De acuerdo a la publicación, esta placa de Nazca, ubicada en el Océano Pacífico en las costas de la América del Sur, se desprendió de la superficie, en la época prehistórica y quedó atrapada en el manto que cubre el fondo del océano.
Una placa que permanece suspendida bajo el océano
Desde hace varias décadas se sospechaba de la existencia de esta placa en el Océano Pacifico debido a varias anomalías internas que habían sido detectadas y eran objeto de estudios. Pero no fue sino hasta ahora cuando ha sido descubierta, lo cual se había dificultado por la falta de tecnología adecuada.
Este hallazgo se logró gracias a un análisis sísmico profundo que se llevó desde un barco de exploración. Con equipos de última generación, los geólogos y científicos han podido ver, de primera mano la forma en que esta vieja placa marina se hundió, después de desprenderse, en el lecho marino.
Para poder encontrarla, los investigadores se han valido de la tecnología de ondas sísmicas que permitieron localizarla a través del frío y la densidad del manto que la recubre. Dichas ondas se ralentizan al viajar por la masa de tierra así los científicos pudieron identificarla por su estructura particular.
Es de resaltar que, actualmente, esta área no muestra subducción, que es cuando una placa oceánica más pesada choca con una más liviana. Lo cual hace válida la teoría que defiende que es una placa oceánica muy antigua que, al momento de su desprendimiento, se ha ido hundiendo muy lentamente en el manto.
Pero lo que más causa impresión es ver cómo permanece como en suspensión rígida en un área bien definida del manto del lecho marino, a una profundidad que va desde los 420 y los 540 kilómetros por debajo de la superficie de las aguas del Océano Pacífico.
Las implicaciones de este hallazgo para la geología de la Tierra
Este hallazgo da una nueva perspectiva sobre los procesos geológicos de la Tierra, principalmente de las capas más profundas. También brinda una explicación sobre una misteriosa brecha la cual se encuentra en la gran provincia de baja velocidad de corte del Océano Pacífico, la cual es reservorios de material primitivo.
En este sentido, se determinó que la gruesa viscosidad de la zona donde permanece atrapada esta placa da una explicación plausible sobre el hecho de que aún no se haya hundido del todo. Los estudios geológicos desde el punto de vista dinámico sugieren que hay interacciones entre las losas y el manto del lecho marino.
Todo ello ha contribuido a darles estabilidad durante millones de años dándoles, igualmente, su forma. Por otra parte, este descubrimiento parte de identificar una zona que tiene muy alta densidad y una gran brecha en la estructura a la que le han calculado un ancho de unos 20 grados.
Concluyendo, esta “Tierra de los Dinosaurios” consiste en una placa terrestre que se desprendió hace unos 120 millones de años. Lo notable es que permanece suspendida, bajo las aguas del Océano Pacífico, a más de 500 kilómetros de profundidad.








