Una de las primeras enseñanzas acerca de la explotación de los recursos naturales no renovables es que, una vez agotados, no existe forma de recuperarlos, y si se trata de algo muy necesario, la única alternativa para poder obtenerlos es encontrar una nueva fuente en algún otro lugar. Es por eso que Trump está en serios problemas, pues el mayor yacimiento de Estados Unidos solo está escupiendo agua y aire.
Un yacimiento que parecía ser infinito se agota
La Tierra es un lugar exuberante que demuestra su abundancia por doquier, en todos los lugares existen inmensas cantidades de elementos de diversas clases a nuestra disposición. Eso resulta muy evidente si se toma en cuenta cómo se ha desarrollado el crecimiento de la población, que ahora ocupa la mayoría de sus espacios, y aun así, sigue ofreciendo todo lo necesario para que la vida siga adelante.
Pero hay una importante limitación en lo que respecta a los recursos no renovables, pues una vez que se gastan, jamás se vuelven a recuperar. Y fue precisamente su explotación lo que ha metido a Trump en graves problemas, pues lo que parecía algo muy lejano en el tiempo ya está ocurriendo, y es que el mayor yacimiento que existe en Estados Unidos se agota, y ahora solo está escupiendo agua y aire.
La Cuenca Pérmica de Estados Unidos ha entregado todo
La industria petrolera de Estados Unidos vive momentos de gran preocupación debido a que están notando los primeros síntomas de que su mayor yacimiento, la Cuenca Pérmica, se está quedando seca. Aunque esto es algo que acontece normalmente con esta clase de recursos, se suponía que todavía contenía grandes cantidades de crudo, y que su empobrecimiento sucedería mucho tiempo después.
La extracción del petróleo de esquisto que se realiza en esta cuenca fue la que catapultó hace más de 20 años a esta nación como el principal productor del planeta (al contrario de España que no quiere abrir esta reserva), superando por mucho a los países pertenecientes a la OPEP. Están obteniendo cerca de 13.5 millones de barriles de petróleo al día (bpd), y la mitad de ellos, cerca de 6.5 millones bpd, proceden de esta zona.
Ahora bien, sacar toda esa cantidad de combustibles fósiles de esta Cuenca Pérmica, que es la más grande y abundante del mundo, está acabando con sus existencias, pues en zonas como Delaware y Midland, solo queda la mitad de su contenido. Esto significa que ese crudo se está volviendo, de manera progresiva, mucho más liviano y escaso, mientras que su contenido de agua y gas está aumentando.
Este yacimiento todavía tiene mucho que ofrecer, y sigue aumentando su producción, no obstante, y según los cálculos de los expertos, entre 2027 y 2030 llegará a su máxima producción, para posteriormente comenzar su declive. Actualmente, continúa el auge de la extracción, pero a un ritmo ligeramente menor del que se venía realizando, y la tendencia se dirige hacia la estabilización de sus niveles.
Perforar genera más agua y gas que petróleo
Mientras que se agota el yacimiento petrolero de la Cuenca Pérmica, se incrementan sus contenidos de agua y gas, lo cual puede generar un aumento del costo de extracción por cada barril. Con respecto al gas, hay que procesarlo y buscar la forma de trasladarlo, mientras que inyectar el agua en su totalidad en el suelo eleva la actividad sísmica, así que es necesario encontrar una manera de deshacerse del resto.
Concluyendo, el mayor yacimiento de petróleo de esquisto de Estados Unidos, la cuenca Pérmica, se está agotando, y se dirige hacia su máxima producción entre 2027 y 2030, para posteriormente iniciar su declive. Se están incrementando las proporciones de agua y gas, que aumentan los gastos (como sucede con este país que también quiere abrir el agujero negro de la Tierra para extraer más petróleo que Arabia Saudita).