La energía nuclear es una fuente que ofrece muchas ventajas, ambientalmente es limpia y sin emisiones de gases de efecto invernadero, adicionalmente es barata una vez hecha la inversión inicial. Te traemos una gigantesca planta atómica que dará energía por 60 años, pero también es peligrosa. Veámosla.
Una planta nuclear que fue cerrada por el accidente de Fukushima regresa a la vida
La planta de energía nuclear de Kashiwazaki – Kariwa era, en términos de potencia eléctrica instalada la más grande de Japón y del mundo. Pero después del fatal accidente de Fukushima, el organismo japonés Nuclear Regulation Authority (NRA) le quitó la licencia de funcionamiento y operaciones.
Esto hasta que Tepco, la tercera compañía eléctrica más grande del planeta quien la gestiona, implementara nuevas medidas de seguridad en función de lo que aprendieron en el accidente de 2011. Y así lo hicieron porque en 2023 la NRA está lista para devolverle la licencia luego de más de 4.000 horas de inspecciones.
La gigantesca instalación de Kashiwazaki – Kariwa
Esta instalación nuclear se encuentra ubicada en Niigata, una localidad que se ubica en el noroeste de la capital de Japón, Tokio y es administrada por Tokyo Electric Power Company (Tepco). Cuenta con siete reactores de agua hirviendo. Entre todos tienen la capacidad de generar más de 8.200 MW.
Como dijimos, esta planta permanece apagada desde el 2011, pero está próxima a encenderse debido a que la NRA está dispuesta desde diciembre de 2023 a autorizar nuevamente sus operaciones. Y es que el país nipón considera seriamente su regreso a la era atómica como fuente de electricidad.
En este contexto, ya cuenta 12 reactores en pleno funcionamiento y 27 más que permanecen fuera de servicio a la espera de la autorización para su reactivación. Igualmente, tiene dos más que están en construcción. Curiosamente, en el mes de abril de 2023 el gobierno aprobó una legislación nueva para su funcionamiento.
Según la cual se extiende la operación de los reactores sobre el límite actual que es de 60 años. Con esto se quiere decir que si una instalación atómica tiene los 60 años cumplidos y demuestra que puede seguir operando con seguridad, el gobierno le permite hacerlo previa inspección de la NRA.
Regresando de nuevo a la posibilidad de funcionamiento de la central de Kashiwazaki – Kariwa, dicha autorización de la NRA sería el primer paso. Este permiso lo concede ya que Tepco ha realizado grandes mejoras en los protocolos y medidas de seguridad. Ahora solo falta el gobierno regional de Niigata.
En el sentido de que también se requiere su autorización antes de que la planta recupere su permiso de operaciones. Sin embargo, se piensa que, vista la aprobación de la NRA, pues no entorpezca el inicio de planta. Por ahora, Tepco ha pedido el permiso de la NRA para iniciar los trabajos.
Los cuales están referidos a las barras de combustible de energía nuclear en los reactores y otras actividades que no incluyen encendido de equipos. Esto con el fin de ir agilizando su puesta en marcha una vez tengan toda la permisología completa.
El peligro potencial de la energía atómica
A pesar de todas las medidas y protocolos de seguridad que se puedan implantar, dicen los grupos ecologistas que siempre hay un riesgo que se origine un accidente nuclear. Adicionalmente, existen desechos radiactivos los cuales son liberados involuntariamente al ambiente y que afectan la salud de las personas.
Concluyendo, la mayor planta nuclear del mundo que es la de Kashiwazaki – Kariwa será encendida por primera vez desde el 2011, muy pronto. Además, será capaz de generar sobre los 8.200 MW por 60 años o más. Pero, como todo en la vida, nada es perfecto y existe un grave peligro.