Aunque parezca insólito ante el deseo de demostrar poder se ha llegado a pensar en hacer explotar la Luna con bombas nucleares, una idea que afortunadamente no se ha concretado pero que abordaremos con la intención de divulgar los motivos de tan extraña iniciativa y determinar si todavía siguen vigentes esos alocados planes,
Científicos y militares de Estados Unidos tenían frías razones para explotar la Luna
¿Puedes creer que en 1958 había un plan denominado «Proyecto A119» con el objetivo de bombardear la Luna? Una iniciativa que al día de hoy causaría mucho asombro y estupor, conduciendo a más de uno a preguntar acerca de los motivos que condujeron a científicos y autoridades de la época a tan drástica y peligrosa idea.
Se desconocen las circunstancias que prevalecían en ese momento y que estaban llevando a realizar lo que se supone que eran gigantescos esfuerzos, pues hoy en día no sería una tarea fácil, para llevar no a un hombre hasta la superficie de nuestro satélite sino bombas nucleares.
Un informe de la época describe como el propósito era bombardear el área lunar ubicada entre la zona iluminada por la luz solar y la que se encontraba en penumbra lanzando un ataque a nuestro satélite desde una base militar en Kirtland, Nuevo México. En la actualidad ante tal insólita pretensión cualquiera se pregunta por los motivos que impulsaban tal acción.
Aunque parezca absurdo, de acuerdo con algunos expertos, el propósito de Estados Unidos de bombardear la Luna era demostrarle a la Unión Soviética su capacidad armamentística, pues era la época de comienzo de la guerra fría y coincidía con el inicio del desarrollo del programa espacial.
La Guerra Fría: Un concurso para demostrar quien tenía mayor capacidad armamentística nuclear
Como parte de la Guerra Fría se planteó como medida disuasoria ante la URSS hacer estallar en la superficie lunar una bomba de hidrógeno, de modo que se pudiera ver desde cualquier punto de la Tierra, y especialmente desde el Kremlin, que Estados Unidos contaba con un poder nuclear devastador y de largo alcance.
Ese grado de conflictividad entre las dos potencias durante un periodo temporal comprendido entre la finalización de la Segunda Guerra Mundial y el derrumbe del muro de Berlín en 1989 es lo que se conoce como «Guerra Fría», el cual se caracterizó por momentos de gran tensión entre estos dos países que poseían armas nucleares de gran potencia.
La denominación de «Guerra Fría» proviene del hecho de que durante un largo periodo de 40 años estas dos potencias mantuvieron una constante oposición política e ideológica en la que se alternaron la supremacía pero nunca entre ellas se produjo un conflicto militar directo, por lo que esta situación se caracterizó por:
- Ausencia de guerra
- Acciones de disuasión militar, especialmente de tipo nuclear
- Desarrollo de una carrera armamentista nuclear
En una entrevista laboral el solicitante dijo tengo experiencia en explotar bombas nucleares
El proyecto A119 estuvo a cargo de la Fundación para la Investigación de Blindados quien recibió la misión de provocar la detonación de una bomba de hidrógeno en lo que se denomina «Línea de terminación» que divide las zonas de iluminación y sombra formadas por la incidencia de la luz solar sobre la superficie lunar.
Aunque el proyecto se consideró como altamente confidencial los detalles del mismo fueron revelados por Carl Sagan, uno de los expertos sobre el tema más famoso en ese momento, cuando durante una solicitud de un cargo en una universidad de Estados Unidos señaló el objetivo del plan.
En esta oportunidad el astrofísico reveló que el objetivo del Proyecto A119 era bombardear con bombas nucleares la superficie de la Luna para la revelación de moléculas orgánicas, pues se pensó que la explosión generada causaría desprendimiento de la corteza lunar y los fragmentos en forma de meteoritos serían proyectados contra la Tierra.
En conclusión, ha transcurrido mucho tiempo desde ese día de 1958 que estuvieron a punto de bombardear la Luna con armas nucleares como demostración de fuerza, pero aún cuando no se llevó a cabo el proyecto sigue siendo una prueba evidente de hasta donde pudo haber llegado la rivalidad entre Estados Unidos y la antigua URSS.