Las energías son imprescindibles en cualquier lugar del mundo, y por suerte cada día se recurre más a las energías renovables, muy beneficiosas tanto para el planeta como para la economía y para todos aquellos que deciden aprovecharlas. Te contamos cuál es la decisión de la Unión Europea con una energía futurista que va a mover 7.000 millones de euros pero sólo unos pocos países se beneficiarán de ella… ¡España en vilo!.
Tipos de energías renovables
Las llamadas energías renovables son aquellas fuentes energéticas que se basan en la utilización de recursos naturales, siendo prácticamente ilimitadas y estando disponibles en casi cualquier lugar del planeta. Se caracterizan además por no utilizar combustibles fósiles, algo que sí sucede con las energías convencionales, lo que hace que las renovables puedan, tal y como dice su nombre, «renovarse» ilimitadamente.
Estos son los tipos de energías renovables que más se utilizan en todo el planeta:
- Energía solar
- Energía eólica
- Energía hidráulica
- Energía geotérmica
- Energía de la biomasa
- Energía del mar
La energía futurista que la Unión Europea le dará a unos pocos países
La Comisión Europea ha aprobado un total de 6.900 millones de euros de ayudas estatales para Proyectos de Interés Común Europeo (IPCEI) centrados en el hidrógeno, y únicamente para 7 Estados miembros de la Unión Europea. ‘IPCEI Hy2Infra’, que así se llama el proyecto, fue creado y preparado conjuntamente por esos 7 estados miembros: Francia, Alemania, Países Bajos, Italia, Polonia, Portugal y Eslovaquia. Sí, España está fuera, pero lo cierto es que podría estar dentro a corto-medio plazo.
Los Estados miembros incluidos en este grupo aportarán hasta 6.900 millones de euros de financiación pública, y se espera que unos 5.400 millones de euros se desbloqueen en inversiones privadas. 32 empresas con actividades en al menos uno de los países miembros, incluidas pymes, participarán en 33 proyectos de este IPCEI. Centrada en una energía futurista como es el hidrógeno, que cada día tiene más presencia en el mundo, especialmente en el sector de la automoción.
El objetivo de este proyecto es, principalmente, producir hidrógeno renovable, para lo que se desplegarán 3,2 GW de electrolizadores a gran escala, con un despliegue de gasoductos de transporte y distribución de hidrógeno, tanto nuevo como reutilizado, de unos 2.700 km. Además, en el proyecto figura también el desarrollo de instalaciones de almacenamiento de hidrógeno a gran escala, con una capacidad de al menos 370 GWh. También se llevará a cabo la construcción de terminales de manipulación e infraestructuras portuarias conexas para los buques de transporte de hidrógeno orgánico líquido para la manipulación de 6.000 toneladas de hidrógeno al año.
Los países participantes en este programa para producir esta energía futurista colaborarán también en materia de interoperabilidad y normas comunes, así se facilitará la futura integración del mercado y se evitarán barreras. El IPCEI apoyará que aparezca de forma gradual una infraestructura de hidrógeno a escala de la UE a partir de diferentes agrupaciones regionales.
Dentro de este ‘IPCEI Hy2Infra‘ para apostar por la energía futurista se espera también que se pongan en marcha otros proyectos, como varios electrizadores a gran escala que deberán estar operativos entre 2026-2028, gasoductos entre 2027-2029 dependiendo de su zona geográfica y la finalización general de todos los proyectos en 2029, con plazos que pueden variar en función de cada proyecto y las empresas que se encargarán de él.
Hasta ahora son tres los proyectos aprobados dentro del IPCEI: el propio PICEI Hy2Tech que se centra en el desarrollo de tecnologías de hidrógeno para usuarios finales, el IPCEI Hy2Use que se centra en las aplicaciones del hidrógeno en el sector industrial y el IPCEI Hy2Infra, el cual se refiere a las inversiones en infraestructura que no están cubiertas por los dos primeros.
El hidrógeno es la energía futurista que tiene ya mucho presente, por ejemplo en algunos vehículos.











