España quería cerrar sus centrales nucleares: ha sucedido algo inesperado

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Publicado el: 2 de enero de 2025
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Entre el año 2025 y 2035, se esperaba la clausura y el desmantelamiento paulatino de las centrales nucleares en España. Comenzando con Almaraz en Cáceres, todo estaba preparado para comenzar. Sin embargo, es posible que los planes se vengan abajo porque ha sucedido algo inesperado. Veamos de qué se trata.

Un evento inesperado que hace que la clausura de las centrales nucleares se suspenda en Europa y España

España venía avanzando en lo concerniente a métodos y procedimientos para la clausura de sus centrales nucleares. Una actividad que sería a largo plazo, en cumplimiento con su posición de ser un país antinuclear a pesar de las diferencias que tenía con otras naciones que eran proclives a este tipo de energía.

Sin embargo, la Unión Europea está reculando sobre este tema, especialmente después de que nuestro país dio un cambio a su política por efecto de la crisis energética que viene enfrentando el continente debido a la escasez del combustible ruso por la Guerra de Ucrania y las represalias tomadas por Rusia contra Europa.

La crisis energética ha hecho que Europa y España cambien su posición

El Gobierno de España había presentado su plan de cierre de centrales nucleares. Esta clausura implicaría que se dejarían de producir unos 7.123 MWe, de acuerdo a la Agencia Internacional de la Energía Atómica (IAEA por sus siglas en inglés), lo que equivale al 20 % de la producción nacional de energía eléctrica.

Pero además de estos cierres, nuestro país también incluía el incremento de impuestos y trabas fiscales para los operadores de los reactores. Ahora, más de una decena de países están haciendo grandes esfuerzos para la reactivación y creación de plantas de este tipo de energía, mientras España está indecisa.

Este incremento de la energía atómica viene con la promoción del desarrollo y construcción de reactores modulares pequeños que son de tecnología SMR (los mismos que tienen proyectados instalar Google, Amazon y Microsoft). Estos equipos son de un tamaño mucho menor que los convencionales.

Ofreciendo una capacidad de generar 300 MW de potencia eléctrica, por lo que con tres de estos se hace el equivalente de los 1.000 MW que significa una instalación de gran tamaño, solo que requieren una fracción del espacio que ocupa esta última. Asimismo, para su refrigeración necesitan mucha menos agua.

Por otro lado, tienen un muy alto nivel de seguridad. Se debe recordar que la energía atómica se caracteriza por ser limpia y prácticamente inagotable, por lo que España está comenzando a verla como una solución a la crisis energética que cada vez va tomando mayores proporciones, además de que la inversión no sería tan cuantiosa.

La península ibérica ha mantenido, hasta ahora, una posición contra la operación de las centrales nucleares, una inclinación solamente compartida por Bélgica, que después de la Guerra de Ucrania suspendió y prorrogó sus planes de cerrar sus instalaciones atómicas por un periodo de diez años.

La nueva moda energética en el mundo es la atómica

Esta moda se ha ido extendiendo por los países de la Unión Europea. Alemania, que precipitó el cierre de sus centrales nucleares por el desastre de Fukushima, ahora va en la dirección opuesta para su reactivación. Mientras que países como Polonia están interesados en la construcción de instalaciones nuevas.

Respecto Italia el caso es más curioso, puesto que su demanda eléctrica es satisfecha en un 37,3 % por la quema de carbón lo que la convierte en una de las naciones con mayor dependencia de este combustible. Es por eso que está abogando por reactivar sus instalaciones atómicas, pero con la tecnología SMR.

Concluyendo, las centrales nucleares estaban condenadas a desaparecer de España (y de la Unión Europea hasta que se inventó esta excusa) pero debido a la crisis energética, ha reevaluado su posición. Por ello, lo más seguro es que dé una prórroga al proceso de clausura y desmantelamiento de los reactores.