Un equipo vinculado a la Universidade Federal de Roraima (UFRR) ha documentado huellas fósiles de dinosaurios en el norte de Roraima (Brasil), dentro de la cuenca del Tacutu, en el municipio de Bonfim. El registro (más de diez icnitas en afloramientos rocosos) se sitúa en torno a hace más de 103 millones de años y se presenta como una evidencia directa de presencia de dinosaurios en una zona amazónica donde, hasta ahora, los hallazgos eran escasos y fragmentarios.
Huellas de dinosaurios en la cuenca del Tacutu (Roraima)
Las marcas no permiten asignar una especie concreta, pero sí apuntan a varios grupos (terópodos tipo raptor, ornitópodos herbívoros y dinosaurios acorazados) a partir de la forma y la dinámica de las pisadas. En paralelo, reportes posteriores hablan de más de un centenar de marcas en la misma región, lo que sugiere que el Tacutu podría convertirse en un corredor icnológico de primer orden si se amplían los muestreos.
Por qué es tan raro encontrar fósiles en la Amazonia
El punto clave no es solo la selva, sino la geología y el clima. La meteorización (intemperismo) deshace rápidamente superficies expuestas y dificulta que huesos o huellas sobrevivan millones de años. En el Tacutu, la explicación que manejan los investigadores es casi una escena de barro y agua (una llanura con canales fluviales) donde la huella se estabiliza, se endurece y luego queda sellada por sedimentos.
Fotogrametría y modelos 3D (la ciencia de medir una pisada)
La historia del hallazgo también es una historia de método. Las huellas se detectaron en trabajos de campo años atrás y el análisis se reactivó después con fotogrametría, una técnica que convierte series de fotografías en modelos 3D de alta fidelidad. Eso permite comparar profundidades, bordes y proporciones sin depender solo de una observación visual en el terreno.
Qué cambia en el mapa de la paleontología brasileña
El hallazgo en Roraima no compite con los grandes iconos de icnitas de Brasil, los complementa. En el nordeste, por ejemplo, el Monumento Natural Vale dos Dinossauros (Paraíba) lleva tiempo articulando conservación, visitas y divulgación alrededor de huellas fosilizadas. Esa comparación sirve para entender lo que podría venir en el Tacutu si se avanza en protección del sitio, acceso científico y gestión pública.
Lo que viene ahora (más huellas y más negociación)
El siguiente cuello de botella no es solo científico. Parte de los afloramientos potenciales está en áreas privadas o bajo regímenes de uso que exigen acuerdos y autorizaciones, y el avance puede ser lento si crecen los temores a impactos sobre la tenencia de la tierra. El resultado es que el futuro del yacimiento depende tanto del mapeo como de la gobernanza del territorio.
La nota de prensa original se pueden encontrar en Boletim de Resumos del 12º Simpósio Brasileiro de Paleontologia de Vertebrados (Sociedade Brasileira de Paleontologia).






