Este material será el fin de la calefacción este invierno: el perfecto aislante, casi invisible

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Publicado el: 17 de octubre de 2024
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perfecto aislante

Por fin ha sido encontrado el perfecto aislante, sus propiedades asombrosas de ultradensidad y nula conductividad térmica lo hacen único en su tipo. Aquí te presentamos sus cualidades, ventajas y precio de este material revolucionario ¡Te sorprenderá!

Quienes buscaban el perfecto aislante ya pueden descansar: llegó el aerogel

Tal vez digas «Un momento, el aerogel no tiene nada de nuevo, pues salió ¡hace más de 60 años!» Por eso precisamente decimos que te sorprenderás, porque hasta ahora no había sido ampliamente utilizado en obras de construcción, pero ha sido recientemente que se han enfocado sus cualidades de superaislante.

El aerogel se inventó en 1931 y desde entonces recibió el nombre de «humo sólido» en el sector de la aeronáutica espacial donde comenzaron sus aplicaciones. Este interesante material reúne las siguientes características:

  • Compuesto por carbono, óxido de cromo, alúmina, sílice y estaño.
  • Alta rigidez.
  • Color traslúcido azulado.
  • Bastante poroso.
  • Muy ligero (tan denso como el aire).

Fruto de un proceso de gasificación denominado secado supercrítico

Este material es fabricado mediante un proceso donde los componentes son gasificados y el resultado es una masa porosa con una densidad mínima, casi parecida a la del aire.

En la industria espacial donde la masa y el peso son fundamentales precisamente fue la ultradensidad de este material lo que lo convirtieron en un elemento de gran utilidad, sin embargo, nuevos ensayos orientados hacia el sector de la construcción lo catapultan ahora como un aislante revolucionario.

Capacidad asombrosa para resguardar de altas y bajas temperaturas

Las propiedades aislantes del aerogel son tan increíbles que una capa de este material con un grosor de apenas 6 milímetros puede reducir la temperatura de 1000 °C a tan solo 100 °C, demostrando así la utilidad que tendría como aislante en la época de verano o durante incendios.

La asombrosamente reducida conductividad térmica del aerogel, lo ubican como uno de los mejores limitantes del calor o el frío y muy superior a cualquiera de los otros materiales aislantes conocidos.

A estas alturas posiblemente te preguntes «¿Cómo es que hace casi 70 años que se conoce este material y ahora es que vienen a presentarlo como el aislante ideal en las construcciones?» Pues la respuesta es sencilla, aun cuando es bastante liviano y ofrece muy buena protección contra altas o bajas temperaturas, todavía es muy costoso.

Nada es perfecto: El aerogel tiene pequeñas desventajas

Si el precio del aerogel se compara con el de los otros materiales aislantes encontraremos que ninguno lo supera, siempre se va a necesitar mucho más dinero para comprar el mínimo de este aislante.

Otro factor que lo ha hecho poco conocido como material de construcción es la pericia que requiere su manejo, puesto que en su aplicación es necesario contar con los conocimientos apropiados a su fragilidad.

Afortunadamente se ha encontrado la manera de reducir sus costes y es por ello que ahora empieza a emplearse cada día más en muchas construcciones; por ejemplo, se está combinando con vidrio y lana mineral.

Aunque todavía es muy pronto para decir que el aerogel será un material comúnmente utilizado como aislante en la construcción, se ha podido comprobar que en las edificaciones donde se ha empleado se ha obtenido una excelente protección ignífuga y un revestimiento térmico sin igual que han permitido mantener intacta la infraestructura por muchos años.

Ejemplo de estas construcciones donde se ha empleado el aerogel con excelentes resultados es la Biosfera de Montreal, una edificación esférica de 76 metros de diámetro que fue ideada por Richard Buckminster Fuller en 1967 como muestra arquitectónica sostenible.

Esta construcción que hoy es el principal museo de Canadá con la temática del agua es una clara evidencia de las excelentes propiedades de conductividad térmica que posee el aerogel.

En definitiva, llegará el día que los costes se reduzcan al mínimo y este ultraliviano traslúcido o casi invisible material que es el aerogel sea ampliamente reconocido como el perfecto aislante.