En las últimas décadas China ha dado pruebas fehacientes de sus desarrollos tecnológicos, especialmente en áreas de influencia vinculadas con las empresas de Elon Musk, y acá veremos el último de los logros alcanzados por esta potencia asiática en su camino hacia el liderazgo mundial.
No importan los esfuerzos realizados por Musk porque China en la carrera lo ha dejado muy atrás
El magnate dueño de empresas como Tesla y SpaceX ha realizado cuantiosas inversiones para tratar de alcanzar desarrollos tecnológicos de primer orden y con ello superar al resto de compañías con las que compite, especialmente de China, las cuales dan muestras frecuentes de innovación y esfuerzo científico.
Una de las muestras más recientes está relacionada con la transmisión de datos satelitales con el propósito de obtener una comunicación más rápida y efectiva, un área donde el magnate de origen sudafricano compite mediante Starlink, un servicio global de internet satelital.
Uno de los puntos fuertes con el que Musk busca alcanzar la preferencia de los usuarios es no solo el acceso a puntos remotos en el planeta sino además que la comunicación se lleve a cabo con la máxima velocidad posible de transmisión de datos, sin embargo, los chinos parecen haberle superado ampliamente.
Cinco veces más es la marca que han impuesto los chinos en esta competencia de rapidez
China ha logrado lo que parecía imposible: ha alcanzado una velocidad de transmisión de datos cinco veces mayor que el sistema Starlink de la empresa de Elon Musk, SpaceX, un proceso que llevó a cabo transmitiendo desde un satélite geoestacionario en un punto terrestre.
Los científicos de China en la reseña publicada en uno de los medios de ese país refieren haber alcanzado una velocidad de 1 Gbps mediante un láser de solo 2 W de potencia. La prueba se llevó a cabo en una de las provincias del suroeste de China llamada Yunnan.
De acuerdo con la información aparecida en un diario de China, el satélite desde donde se transmitieron los datos estaba ubicado a una altura aproximada de 36 000 km; además se utilizó un telescopio instalado en la Tierra que tiene una medida de 1.8 metros, datos que revelan la viabilidad del proyecto.
Uno de los aspectos más resaltantes de esta experiencia científica es que la tecnología empleada ayudó en la reducción significativa de las distorsiones provocadas por los movimientos atmosféricos de carácter turbulento, el cual representa una de las principales barreras en esta forma de comunicación.
Estas dos tecnologías respaldan el próximo arribo de la conexión 6G y adivinen quién las utiliza
En el estudio llevado a cabo por científicos de la Universidad de Correos y Telecomunicaciones de Pekín y la Academia de Ciencias de China se señala que se pudieron obtener mejoras en la transmisión y lograr una señal fiable con una tasa que pasó del 72% al 91,1%., mediante estas dos técnicas:
- Óptica adaptativa
- Recepción de diversidad modal
Los científicos a cargo de la prueba dijeron haber comprobado la utilidad de estas tecnologías para alcanzar la transferencia de datos sensibles o voluminosos aun desde órbitas a una gran altitud, sin embargo, no fueron proporcionados los datos del satélite utilizado.
Los responsables del ensayo llevado a cabo donde se logró esta alta velocidad de transmisión aseguran que las tecnologías empleadas permitieron transferencias rápidas de datos sensibles o de gran volumen incluso desde órbitas altas, aunque no se ha especificado la identidad del satélite empleado.
Tales resultados han permitido evidenciar que la potencia asiática ha redoblado esfuerzos en desarrollar tecnologías comunicacionales que involucran el uso de láser espacial, y otra prueba de ello, aunque no verificada, es que en 2020 el satélite chino Shijian-20 alcanzó un récord mundial con una transmisión de 10 Gbp, aparte de haber logrado:.
- La integración de redes espaciales y terrestres
- Avance en futuras generaciones de comunicación 6G
En conclusión, naturalmente Elon Musk está en grave riesgo luego de que leyera en una publicación que China había alcanzado un récord en velocidad de transmisión de datos satelitales, uno de los principales desarrollos tecnológicos en los que ha invertido cuantiosos recursos en los últimos años.
