Cuando Arabia Saudí anunció el desarrollo del proyecto Neom se pensó que The Line sería una fabulosa ciudad que atraería muchos visitantes y el deseo de las masas de vivir en ella, sin embargo, ha sido una gran equivocación. Veamos qué ocurrió.
Estos costes de Neom dejarán en la ruina a Arabia Saudí
El coste de construcción de la que fue considerada en su momento como la ciudad ecológica del futuro se triplicó, al igual que el tiempo que demorará la construcción, estimándose que se llevará más de medio siglo finalizar los trabajos.
Proyectada como una ciudad futurística ecológica, The Line se está llevando más tiempo y dinero del que se tenía previsto. Arabia Saudí realizó modificaciones al diseño original para tratar de finalizar de una vez por todas su construcción, pero todavía el final no se vislumbra.
Los inconvenientes logísticos que ha tenido este enorme experimento urbanístico en pleno desierto han incidido en el abultamiento de los costes y la abundancia de retrasos, lo cual ha conducido a un considerable recorte presupuestario.
La situación luce preocupante para los saudís al notar que cuando ya se han gastado 50 mil millones de dólares el proyecto apenas se encuentra en fase de planificación o etapa inicial de construcción y culminarlo requerirá el equivalente a 25 veces el presupuesto anual saudí.
Por qué resulta demasiado costoso culminar este proyecto faraónico
De acuerdo a datos arrojados durante una auditoría interna el tiempo que demorarán los constructores en culminar Neom será de 55 años, mientras que el presupuesto proyectado se ha expandido de tal manera que ahora resulta un desastre financiero.
De acuerdo con The Wall Street Journal, en sus inicios el presupuesto de la megaciudad era un poco más de dos billones de dólares, pero ahora este asciende a 8,8 billones de dólares, un monto tan alto que aún para un país tan rico como Arabia Saudí significa una pesada carga.
El diseño original de esta urbe en medio de las ardientes dunas árabes es apoteósico, pues de acuerdo a los primeros planos y maquetas exhibidas dentro de esta ciudad ecológica del futuro habría:
- Majestuosos e imponentes rascacielos
- Una colosal estación de esquí
- Un lujoso distrito comercial flotante
- Ríos artificiales
- Recursos tecnológicos hipermodernos
Por si fuera poco, estaría flanqueada por una formidable muralla con una extensión de 170 kilómetros y nada menos y nada más que ¡Medio kilómetro de altura!, a lo que cabe preguntarse si esperaban alguna invasión o si esta sería utilizada como barrera durante las tormentas de arena.
La raíz del estrepitoso fracaso árabe: La corrupción a gran escala
Diversos factores manifestados durante el desenvolvimiento de las acciones en torno a la construcción conllevaron a un incremento exorbitante de los costes, haciendo que se triplicara el coste de levantamiento de un barrio de clase media como Sóndala, pasando de 1300 a ¡3900 millones de dólares!
La opacidad financiera se conjugó con factores logísticos, provocando que el presupuesto se elevara a límites insuperables y con ello el tiempo previsto de construcción se multiplicara muchas veces. Específicamente, se presentaron los siguientes obstáculos:
- Manipulación deliberada de las previsiones financieras, esto con el propósito de que se justificara el aumento de los costes
- Mano de obra calificada escasamente disponible en la región.
- Pocas carreteras o vías de comunicación
- Las condiciones climáticas dificultan y encarecen la disposición artificial de masas de agua
Aun cuando se han tomado medidas para enderezar el rumbo como un acentuado recorte presupuestario mediante la reducción de la futura población y de la extensión de la ciudad, además de la eliminación de la planta desalinizadora, este proyecto árabe no deja de ser considerado un desastre financiero.
En conclusión, un proyecto como Neom que requiera de más de medio siglo y un presupuesto superior a los 8 billones podría acabar con cualquier país, aun cuando este sea una petromonarquía como Arabia Saudí.
