En caso de que exista alguna posibilidad cierta de que Trump cumpla su amenaza de deportar a Elon Musk muchos se preguntan qué sucedería con Tesla la fábrica estadounidense de coches eléctricos. Aquí veremos las posibles alternativas de esta situación que ha escalado marcando el rompimiento definitivo entre los antiguos aliados.
Un giro dramático: De rico dueño de Tesla a criticado funcionario con grandes pérdidas
Musk adquirió la ciudadanía estadounidense por naturalización en 2002 de forma legal luego de realizar estudios en Estados Unidos, país en el que ha estado desde 1992 luego de arribar de Canadá, donde vivió con su madre una vez que esta se divorciara del padre de Elon, un rico comerciante de esmeraldas en Sudáfrica.
Este magnate de tres nacionalidades es claro ejemplo del sueño americano, pues luego de hacerse ciudadano estadounidense empezó a construir su imperio y en menos de dos décadas se erige como el hombre más rico del mundo y propietario de emblemáticas empresas en los sectores:
- Movilidad eléctrica
- Telecomunicación espacial
- Redes sociales
Dando un espectacular giro en su trayectoria de hombre de negocios en los últimos años incursionó en la política y se convierte en uno de los principales aliados de Donald Trump en su camino hacia un segundo mandato, acompañándolo dentro del gobierno luego de que el republicano alcanzara el triunfo.
Después de una controversial actuación al frente de Departamento de Eficiencia Gubernamental o DOGE, por sus siglas en inglés, donde planteó un conjunto de medidas que motivó el rechazo público, una caída de las ventas en sus empresas y el desplome de sus acciones, el multimillonario de origen sudafricano presentó su renuncia al cargo.
Las críticas que no solo lo llevarán lejos de Estados Unidos sino también fuera de la ruta espacial
Recientemente Donald Trump sostuvo ante la prensa que su administración considera deportar al hombre más rico del mundo y quien fuera uno de sus principales aliados para ganar la presidencia, siendo este originario de Sudáfrica y ciudadano estadounidense por naturalización.
Estas declaraciones del presidente de la Casa Blanca se suman a otras subidas de tono y que forman parte del conflicto verbal que se ha producido entre los magnates luego del retiro de Elon Musk del gobierno, donde tuvo un polémico desempeño como funcionario.
Sin embargo, lo expresado por Trump durante la conferencia de prensa tuvo un efecto mayor que los insultos previamente realizados por cuanto provocaron una reacción negativa en el mercado e hicieron que las acciones de Tesla, una de las principales compañías de Musk, registraran una drástica caída del 6%.
A juicio del analista bursátil Arthur Horta, la declaración hecha por Donald Trump en respuesta a las críticas a sus políticas fiscales por parte del magnate afectaron el precio de las acciones de la empresa de Musk debido a los efectos negativos que provocó en la imagen de la misma.
La propiedad de los coches de la marca estadounidense está protegida por una enmienda constitucional
Entre las críticas efectuadas por el también dueño de SpaceX está la de considerar una locura el polémico plan presupuestario al que Trump denominó como «El gran y hermoso proyecto de ley», argumentando Musk que el mismo catapultaría hasta niveles inimaginables la deuda de Estados Unidos.
El paquete fiscal de Trump es controversial porque prevé un importante recorte del gasto social pero sobre todo el súper millonario de origen sudafricano puede verse afectado si son recortados los subsidios federales destinados a sus empresas, por lo que ha amenazado con demandar a los legisladores que han votado a favor de este plan.
Un experto en Derecho Migratorio, Vinícius Bicalho, explica que un ciudadano estadounidense, independientemente si es naturalizado o nacido en el país, no puede ser deportado bajo ninguna circunstancia, porque la Decimocuarta Enmienda señala que todos los ciudadanos gozan de la misma protección ante la ley.
En conclusión, es poco probable que tras ser blanco de las críticas Trump pueda cumplir su amenaza de deportar a Elon Musk, por lo que a menos que este decida renunciar voluntariamente a su nacionalización, el magnate oriundo de Sudáfrica seguirá siendo ciudadano estadounidense y propietario de la firma emblemática Tesla.