La vela eólica podría significar el fin de los paneles solares pero en el espacio porque es allí donde cumple una función parecida a estos, planteándose la sustitución de los vientos por una brisa solar que ayudará a los seres humanos a llegar más lejos en el universo. Seguro te sorprenderás al ver un cohete velero.
La antigua vela pasará de los medianos barcos en la Tierra a los gigantes cohetes en el espacio
La humanidad comenzó a realizar grandes viajes ayudándose con el viento que de manera gratuita lo impulsaba a recorrer las distancias, pero los combustibles fósiles llegaron para reemplazarlo, aunque resultan más pesados, costosos y no recargables. De hecho las misiones en el espacio son programadas para que finalicen una vez agotado el combustible.
Evidencia de este problema de peso es la interrupción en las comunicaciones con las estaciones terrestres que experimentó hace poco tiempo atrás Dawn, la nave espacial de la NASA, cuando se quedó sin combustible, lo que da una idea de los riesgos que implica en la actualidad la preparación de la invasión a Marte.
De allí que una meta dentro de la carrera espacial sea disminuir el peso de las naves, lo que implica una reducción del combustible porque el mismo representa 95% de su tonelaje y en este sentido la recomendación es buscar una alternativa a los impulsores de combustión, y la NASA ha propuesto ¡utilizar velas!
A Marte no llegarán pesadas naves espaciales sino ligeros transbordadores con velas
Considerando que el peso de los motores y el combustible han limitado el alcance de los viajes espaciales al punto que hasta ahora solo se ha podido llegar hasta la luna, la estrategia lógica sería buscar una alternativa que permita sustituir ambos y para ello se ha pensado en este impulsor muy utilizado en épocas remotas cuando los seres humanos empezaron a realizar largos recorridos. .
Este impulsor que se remonta a los primeros viajes del hombre primitivo y que vendría a sustituir a los modernos motores de los cohetes y su combustible utilizado no es otro que las velas, lo cual suena un poco extraño tratándose del espacio exterior, un lugar donde se asume que no hay vientos que golpeen contra ellas.
Lo que sucede es que, naturalmente, no se trata de las velas náuticas que todos conocemos, sino que son solares pues reciben los rayos del astro sol para producir la energía que impulsará a al cohete. Es la NASA quien se encuentra desarrollando esta tecnología y actualmente está en periodo de prueba para ver qué tan lejos se podría llegar con ellas.
La NASA hará realidad una idea de un científico alemán
Ante la imposibilidad de repostar no existe otra opción que colocar el suficiente combustible para un viaje que incluya retorno, lo cual aumenta el peso a cargar e incrementa los costes por concepto de este recurso de elevado valor, existiendo en todo caso la posibilidad de que por alguna razón el recurso energético se agote.
Previendo que la nave se desplace en una trayectoria sin control la idea de la NASA es dotarlas de unas «aletas» que le permitan orientarse en determinada dirección cuando entre dentro del radio de acción de la atmósfera de la Tierra, es decir, cual barco velero en el mar surcara el espacio.
Sin embargo, la idea no es tan reciente, pues hace casi 4 siglos el astrónomo y matemático alemán Johannes Kepler planteó la exploración del cosmos utilizando velas que pudieran captar lo que llamó en ese momento brisa solar al compararla con la marina que mueve las embarcaciones en el mar.
En conclusión, la vela eólica en la tierra puede asimilarse a paneles solares en el espacio porque en lugar de captar los vientos que ayuden a impulsar las naves hará uso de lo que Kepler llamó alguna vez brisa solar, así ya la NASA no abandona los cohetes sino que al contrario hará que estos lleguen más lejos en el cosmos.