En España se está produciendo una situación en la que la libertad de circulación está siendo restringida, lo que podría representar para algunos una incómoda afectación o la pérdida de una prerrogativa; sin embargo, todo tiene su por qué y aquí expondremos las razones de la prohibición de circular libremente.
En ciudades españolas se considera positiva la restricción impuesta a la libre circulación
La libertad de circulación es un derecho que tienen los ciudadanos en España, sin embargo, en ocasiones es necesario que este criterio sea objeto de consideración, especialmente si se asume que la misma puede afectar al resto de la población.
Precisamente eso es lo que se ha hecho en los últimos años en algunos municipios españoles donde se han establecido prohibiciones para circular libremente por ciertas zonas, lo que sin duda podría considerarse como una coacción o restricción de la libertad.
Sin embargo, estas restricciones en el fondo tienen un propósito benefactor a favor de las comunidades e incluso en beneficio de la salud de la misma persona a la que se le impone la restricción para circular por determinada zona de estas ciudades.
De allí que se vea positivo hacer más difícil la transitabilidad para los propietarios de coches con etiqueta B en las llamadas Zonas de Bajas Emisiones o ZBE porque se trata de restricciones que se imponen a los vehículos que son considerados como generadores de mayor contaminación.
Ten cuidado estas son zonas donde tu derecho a transitar no vale nada
El establecimiento de ZBE previsto en la Ley 7/2021 del Cambio Climático y Transición Energética ha dado a la Dirección General de Tráfico (DGT) la potestad de imponer desde 2016 la colocación de etiquetas ambientales a ciertos vehículos de acuerdo a su emisión contaminante.
La colocación de estas etiquetas a los coches ocurre en municipios donde la población supera los 50 mil habitantes y el propósito de ello es el mejoramiento de la calidad del aire a través de la restricción del tráfico de los vehículos que se asumen como mayormente contaminantes.
Para el caso de municipios que no tengan tal cantidad de población estas restricciones también son aplicadas cuando sobrepasan los 20 mil habitantes y el aire ambiental supera los límites de polución, teniendo los ayuntamientos la potestad de definir las limitaciones de acuerdo al grado de contaminación.
En la normativa se establece un sistema de etiquetas de acuerdo a colores, tipo de vehículo y grado de contaminación, por ejemplo, la etiqueta B de color amarillo es para turismos y furgonetas que funcionan a gasolina con matricula desde enero de 2001, así como estos otros vehículos:
- Con matrícula desde 2006 y que funcionan con diésel
- Con número de plazas mayor a 8
- Los de transporte de mercancías, tanto diésel como gasolina, matriculados a partir de 2006.
Estas son las ciudades españolas que se han unido al club de las severas prohibiciones
Debido a su mayor huella de carbono para los vehículos con la etiqueta B la restricción a la circulación en determinadas zonas urbanas de ciertas ciudades es más fuerte en comparación con aquellos que llevan las etiquetas:
- C
- ECO
- Cero
De hecho, en la actualidad ya hay vehículos sin etiqueta ambiental a los que se les ha prohibido el tráfico en las ZBE, considerándose estos como los de mayor antigüedad y contaminación, asumiéndose que los próximos en limitarse su acceso serán aquellos con etiqueta B.
En ciudades como Barcelona y Bilbao ya se han realizado anuncios sobre la restricción de la transitabilidad en ZBE de vehículos con etiqueta B a partir de 2028 en el caso de la primera, y desde el 15 de junio de este mismo año en la capital de Vizcaya.
En conclusión, aunque signifique decirle adiós a la libertad de circulación y hasta la situación pueda salirse de control para propietarios de coches que tengan estas etiquetas de la DGT en España debe asumirse que con el tiempo se irán incorporando más zonas urbanas a las prohibiciones de circular libremente en aras de una mejor calidad ambiental.
