Si creías que el hidrógeno podría ser el combustible más potente para tu coche es muy probable que estés 700 veces equivocado, pues el nitrógeno se catapulta como la máxima expresión de potencia.
El nitrógeno para tu coche tiene muchos puntos a favor
Parece que la investigación sobre formas energéticas aplicables a motores ha dado con algo definitivo: La potencia de este gas como combustible en su forma líquida es asombrosa. Sin embargo, se ha generado una intensa polémica sobre la viabilidad de su uso.
Al igual que el hidrógeno o las baterías eléctricas el nitrógeno no es considerado como una fuente energética primaria, porque no participa directamente en reacciones químicas que liberan energía en condiciones normales.
Sin embargo, ha sido comprobado que el nitrógeno tiene una potencia setecientos veces mayor que la de cualquier otro combustible convencional, aunque su operatividad a una temperatura de -200 °C plantea pros y contras.
Entre los puntos a favor de este elemento químico está su practicidad de almacenamiento de energía, lo que resulta superior al hidrógeno e hidrocarburos en los motores de combustión.
¿Si hay coches eléctricos porque no hay de nitrógeno?
Respecto a las baterías eléctricas el nitrógeno también resulta superior porque puede producir una mayor acumulación de energía con menos peso y por ende logra una mayor autonomía.
Igualmente resulta más fácil producir N2 que hidrógeno, porque basta producir el enfriamiento del aire hasta una temperatura de -196 °C para luego realizar la separación del oxígeno, finalmente se almacena este gas diatómico en depósitos que se encuentres aislados, evitando así su evaporación.
700 veces más potente cada vez que se evapora
Precisamente la evaporación del nitrógeno líquido es el principio utilizado en la construcción del motor, siendo similar al funcionamiento de los ferrocarriles, con la salvedad de que en el caso del nitrógeno no se requiere de fuente de calor, sino que es la temperatura externa ambiental la que produce el efecto energético.
Cuando el nitrógeno líquido se evapora su volumen se expande 700 veces y esto movimiento puede utilizarse para hacer mover pistones y con ello generar movimiento.
De hecho, ha sido a través de varios estudios que se ha podido demostrar que la generación de movimiento es posible mediante la evaporación del nitrógeno en su forma líquida y sin recurrir a una fuente externa de calor. Dos de estos proyectos han sido:
- Cryocar: a cargo de la Universidad de Washington
- CoolN2Car: desarrollado por la Universidad del Norte de Texas
Otra ventaja que guarda este elemento en su forma líquida respecto a los vehículos eléctricos de tipo convencional es su autonomía y durabilidad, puesto que permite una mayor acumulación de energía en espacios de reducidas dimensiones y con peso inferior.
Nada es perfecto: Aún hay varios desafíos por delante para llegar a aceptarlo como tal
En cuanto a los contras del nitrógeno como combustible, es un hecho que el rendimiento de este elemento resulta inferior en el caso de motores de combustión tradicionales. Además, existen varios puntos que restan viabilidad al uso del nitrógeno como combustible, entre los que destacan:
- Carencia de infraestructura adecuada para el almacenado y distribución
- Riesgos en el manejo de bajísimas temperaturas, pudiendo ocasionar quemaduras por frío
- Riesgo de ausencia de oxígeno en entornos cerrados, en el sentido de que una fuga en un recinto cerrado puede desplazar al oxígeno y la persona en el área puede asfixiase.
Aunque pareciera tener más ventajas que desventajas, estas últimas vinculadas a la infraestructura tienen mucho peso y posiblemente son las que han conllevado a que la tecnología de motores de nitrógeno líquido luzca rezagada frente a otras alternativas.
En conclusión, mientras no se puedan solucionar los contras del uso de nitrógeno como combustible para coche todavía el motor de este recurso energético no verá la luz, aunque sea 700 veces superior a algunos motores que ya están disponibles.