No suena muy esperanzador para la energía del futuro de España que haya un único pozo y que esté a tanta profundidad, pero algo es peor que nada, sobre todo si hay muy buenos planes de ampliación de la productividad ¡Entérate de los detalles!
En La Rioja está la energía del futuro, solo que no está a ras del suelo precisamente
En el pueblo de Sotés, a una docena de kilómetros de Logroño, bajando unos cuatro mil metros en la profundidad de la tierra, la naturaleza escondió la energía que necesitan los españoles para encarar el futuro.
Se trata de un yacimiento de gas natural que fue descubierto en 2010, siendo bautizado con el nombre de «Viura» y hasta ahora es el único que existe en todo el territorio español, pero alimenta muchas expectativas porque parece que es muy rendidor.
Aunque es muy poco probable que «Viura» acabe con la dependencia energética de España, son altamente optimistas las exploraciones que ha realizado HEYCO ENERGY IBERIA, empresa norteamericana a la que le fue concedida la concesión para su explotación.
Según David Alameda, director de Heyco Energy Group a cargo de las operaciones en el yacimiento de Sotés, señala que sería en 2027 que se alcanzaría la mayor productividad y para ello han comenzado a perforar nuevos pozos de una profundidad cercana a los 4 mil metros.
Cuánto debemos esperar de lo que hay bajo tierra ¡Averigüémoslo!
Expertos sostienen que hasta ahora la exploración de los yacimientos en La Rioja es la única actividad en materia de explotación de hidrocarburos que actualmente se realiza en España y muy probablemente no haya más.
Cuánto volumen de gas produce «Viura»
Por ahora las estimaciones de producción se ubican entre 500 mil y 700 mil metros cúbicos por día, aunque se espera llegar a un millón a mediano plazo, que representa la capacidad total que se permite dentro de las condiciones de la concesión.
Los planes para alcanzar este tope en la producción gasífera están guiados por las actividades en los siguientes pozos::
- Viura 1-B: ubicado en Sotés y con 3.600 metros de explotación, su explotación será a finales del 2024
- Viura 3-B, ubicado en Hornos de Moncalvillo, se prevé su perforación eh 2025
- Viura 3-A: Cercano a Viura 1-B, la extracción iniciará en 2026
La inversión a efectuarse será de aproximadamente 25 millones de euros por cada pozo y se espera alcanzar una producción continua que ronde los 15 años.
Los dueños de finca son los primeros beneficiados ¿Cuánto estarán recibiendo?
No se espera que la explotación de los yacimientos de gas en La Rioja ayuden a disminuir la dependencia de energía que actualmente tiene España de los combustibles fósiles, porque se estima que Viura apenas produzca el 1% de la demanda energética española.
En la práctica el Viura representa una gran parte de las reservas con que cuenta España, las cuales ascienden a 3 000 000 x000 metros cúbicos de gas, es decir, 3 BCM. De tales reservas ya se habrían extraído unos 0,5 BCM, por lo que estarían quedando por extraer de estos yacimientos unos 2 500 000 000 metros cúbicos (2,5 mi millones)
Para entender el poco impacto que la extracción de estas reservas tendrían en el mercado energético hay que considerar que en 2023 la demanda gasífera en España estuvo por el orden de los 325,5 TWh. Es decir, si el año pasado en España se gastaron diariamente 90 millones de metros cúbicos de gas, el Viura apena aportaría 900 mil m3, es decir, ¡Prácticamente nada!
Sin embargo, si se espera que la producción de estos yacimientos en La Rioja tenga un impacto económico favorable en la región, puesto que los 1.169 propietarios de fincas ubicadas dentro de un radio de kilometro y medio de los pozos de extracción tendrán un considerable aumento en los pagos que se les efectúen.
Con un precio futuro del gas de 30 euros por MV/h, si los dueños de finca devengaron pagos de 270 mil euros en 2022, para 2027 cuando estén productivos los cuatro pozos obtendrán como compensación anual ¡900 mil euros!
En conclusión, la energía del futuro que se encuentra en un único pozo a casi 4000 metros de profundidad en España tal vez no impacte en la demanda de energía del país, pero si en la economía de los dueños de finca.
