¿Quién no recuerda la película del robot Terminator donde el enemigo era una inteligencia artificial llamada Skynet que evolucionó y se trazó como objetivo acabar con la raza humana? Aquí con estos recuerdos que nos hablan de una peligrosa evolución abordaremos la aparición del primer autómata de estado líquido.
Este robot de estado líquido puede llegar a donde otros no pueden incluso hasta tu corazón
Cada día más la realidad se confunde con la ciencia ficción y algunas películas del pasado de este género ahora parecen documentos o registros que intentaron mostrarnos cómo serían los días que hoy se viven. Una evidencia de esto es la evolución que está teniendo la inteligencia artificial y la robótica.
Los robots no son artefactos de reciente creación porque desde hace algunas décadas se han venido probando diversos ingenios que resultan cada vez más complejos, pero que ahora surja la primera versión en estado líquido y que además incorpora inteligencia artificial, eso si que es toda una novedad.
La noticia sobre este recién creado ingenio salió publicada en la revista Science Advances y en ella se describen los detalles de una tecnología de tipo híbrido en la cual se obtienen amplias capacidades de transformación mediante la combinación de dos propiedades fundamentales de la materia:
- Flexibilidad de los cuerpos líquidos
- Resistencia estructural de la anatomía sólida
La versión microscópica de un Terminator imantado y de buena naturaleza
- Cambio estructural
- Posibilidad de atravesar objetos físicos
- Fusión con otros robots de su misma naturaleza tipo
- Captura de sustancias extrañas durante el proceso
Sin embargo, hay un detalle del que difiere completamente de la versión cinematográfica: El tamaño, puesto que el autómata recientemente creado es tan microscópico que su tamaño alcanza ¡Solo un centímetro! y su manejo depende de imanes externos que le ayudan a transformar su anatomía para evadir objetos.
«Canicas líquidas» dotadas de IA que pueden diagnosticar enfermedades e incluso operar
El diseño de estas unidades robotizadas comprende una estructura contenida dentro de una capsula provista de partículas microscópicas, basándose en una técnica similar a la de «Canicas líquidas»; no obstante, los científicos ampliaron la técnica mediante el desarrollo de cuerpos parecidos a cubos de hielo, cada uno recubierto con partículas hidrofóbicas.
La propiedad de variar de forma hacen de esta novedosa creación una herramienta bastante práctica por cuanto puede circular por las arterias del cuerpo humano o adentrarse en un determinado órgano, por lo que es especialmente útil en el campo de la medicina para tareas de diagnóstico y tratamiento quirúrgico, reduciendo en este último caso los riesgos invasivos.
A diferencia de la máquina destructiva que veíamos en los rodajes de Arnold, este novedoso robot en estado líquido tiene la propiedad de realizar tareas benefactoras en los campos de la medicina o la ingeniería, ampliándose estas áreas en la medida que vayan perfeccionándose estas pequeñas unidades robotizadas.
En conclusión, este primer robot de estado líquido con inteligencia artificial incorporada que nos hace evocar la Skynet de los años 90 se encuentra en periodo experimental y los científicos ahora están explorando nuevas maneras de emplear de manera precisa estos autómatas en distintos entornos.