Ahora se cuenta con una píldora que podría solucionar un grave problema padecido por cientos de millones de personas. Este medicamento representa un avance científico de impacto social significativo, porque se ofrece como una solución para una enfermedad de la cual padece un grueso número de la población. El desarrollo de esta forma vía oral podría significar casi una solución mágica desde diversas perspectivas, porque cambiaría no solo la manera en que es abordado este terrible flagelo de la salud actual, sino que además convertiría a la compañía propietaria en la más exitosa del mercado.
Muchas de estas compañías andan detrás de la píldora mágica, aunque dos se han adelantado
La lucha entre las farmacéuticas por el desarrollo de medicamentos es una competencia que involucra grandes inversiones en investigación y desarrollo. Estas empresas suelen enfrentar el reto de innovar continuamente para descubrir nuevos fármacos que puedan ser utilizados contra enfermedades de amplia prevalencia.
Algunas de estas patologías tienen un gran impacto en la salud pública debido a su capacidad de afectar a un gran número de personas, convirtiéndose en prioridad para la industria farmacéutica. En este contexto, su curación se erige como una de las principales metas para las empresas líderes de este sector.
Este sería el caso de las compañías Lilly y Novo Nordisk, que han tomado la delantera en una carrera destinada a obtener una píldora efectiva para combatir una de las enfermedades modernas más letales: la obesidad. Tratando de alcanzar a las punteras están empresas como Roche, AstraZeneca y Merck-MSD, entre otras.
Las inyectables tienen rechazo, pero no hay medicamento oral que la supere hasta ahora
El estudio por una píldora contra la obesidad es impulsado por un mercado de al menos 150 mil millones de dólares en el próximo lustro y millones de niños con sobrepeso. Se espera que este tipo de medicamento contribuya a una ampliación del mercado por la alternativa que ofrece ante el rechazo hacia los inyectables.
La píldora de la farmacéutica danesa Novo Nordisk redujo el peso corporal en un 15% durante 68 semanas, superando así a la píldora Orforglipron, que logró una reducción del 12,4% luego de 72 semanas, tal como anunciara en agosto pasado su propietaria, la compañía estadounidense Lilly. Frente a los inyectables, ambas píldoras obtuvieron menores porcentajes de efectividad.
Las grandes «farmas» se unen para ganar la carrera, pero aún están lejos de la meta
Aunque Lilly y Novo Nordisk se muestren dominantes en el avance de sus productos, el hecho de que sean menos efectivos que los inyectables ha motivado a otras grandes farmacéuticas a incorporarse a la carrera en la búsqueda de un tratamiento efectivo contra la obesidad, haciendo énfasis en las píldoras.
Ha habido esfuerzos de compañías como Viking Therapeutics, cuya píldora contra la obesidad produjo una reducción de 12% de peso, pero no alcanzó el 15% que se esperaba. Por otro lado, se produjo el abandono del estudio por parte del 20% de los pacientes debido a los efectos secundarios.
En conclusión, el desarrollo de un medicamento vía oral efectivo contra la obesidad es la meta de muchas empresas del sector farmacéutico. La obtención de esta píldora simplificaría la forma de tratamiento de este terrible flagelo de la sociedad moderna y permitiría a su propietaria hacerse de un mercado de miles de millones de dólares. Hasta ahora, los fármacos orales desarrollados no han podido superar en efectividad a los inyectables, por lo que las grandes firmas se están uniendo para compartir el premio en esta carrera por una solución mágica contra esta enfermedad que cuenta con un Día Mundial.
