Los científicos también hicieron un análisis y extracción de esperma. Con dicha extracción de semen se trabaja actualmente en la caracterización de los espermatozoides del cocodrilo para determinar algunos parámetros como la densidad, movilidad, caracterización física del semen y su viabilidad. También, se piensa en técnicas de conservación de semen de la especie.
Expertos en veterinaria, ciencias agrícolas y biología, del Instituto Tecnológico de Costa Rica (TEC) de la Sede de San Carlos, y de la Universidad de Texas A&M, hicieron un análisis completo de los cocodrilos que habitan en esa sede desde el 2000.
Entre los aspectos analizados estuvo la biometría, es decir, la medición del cuerpo del animal. El objetivo fue analizar el crecimiento corporal en una población de cocodrilos en condiciones fuera de su hábitat.
Los científicos también hicieron un análisis y extracción de esperma. Con dicha extracción de semen se trabaja actualmente en la caracterización de los espermatozoides del cocodrilo para determinar algunos parámetros como la densidad, movilidad, caracterización física del semen y su viabilidad. También, se piensa en técnicas de conservación de semen de la especie.
De igual manera, los investigadores del TEC están desarrollando protocolos para la cría de cocodrilo americano, pensando en la posibilidad de crianza y conservación en un futuro.
Los investigadores también hicieron análisis de sangre de las poblaciones de cocodrilos y caimanes, la idea es en el futuro publicar, en conjunto con la Universidad de Texas, un artículo relacionado al tema, en el cual se comparen las condiciones de la sangre de una población in situ y en poblaciones en su hábitat natural. Se evaluará la dieta, tamaño y otros factores que inciden en la presencia de diferentes sustancias en la sangre de los animales.
“Esta investigación es muy amplia y tiene muchas utilidades a futuro. En general, lo más importante de todo el trabajo en conjunto es el aporte cientifíco que deja”, comentó Olivier Castro, investigador de la Escuela de Ingeniería en Agronomía del TEC.
Desde el año 2009, el TEC incursionó en la incubación de huevos y desarrollo de cocodrilos neonatos, obteniéndose hasta la fecha dos animales que han logrado superar los dos años de vida nacidos en el criadero de la Institución.