Las partes se han comprometido a cooperar e intercambiar información acerca del desarrollo de estas dos tecnologías, a las que consideran cruciales para el desarrollo de una sociedad basada en la eficiencia energética y el respeto del medio ambiente.
En el ámbito de la captura de CO2, Enel está realizando pruebas en la planta de Brindisi para el desarrollo de nuevas tecnologías, al tiempo que la Unión Europea se ha comprometido a financiar la central de Endesa de Compostilla.
Kepco, con participación estatal, tiene una posición de monopolio en los sistemas surcoreanos de generación, transmisión y distribución eléctrica, y produce cerca del 94% de la electricidad del país.
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