Según los estudios del Gobierno, la primavera será muy húmeda y el verano no será demasiado caluroso, lo que configurará un verano «muy atípico», explica en declaraciones a Rac1 recogidas por Europa Press. No obstante, el consejero aseguró que el peligro estará presente y que «todo el mundo deberá estar muy proactivo».
«Tenemos un problema de sotobosque pero también tenemos el problema del bosque», ha explicado Baltasar, quien avanza que la Conselleria está actuando a fondo para garantizar la máxima infraestructura de defensa con cortafuegos, actuaciones sobre las rieras, y la apertura de caminos rurales.
Según las previsiones del Servei Català de Meteorologia (SMC), mayo continuará siendo muy lluvioso, lo que hace que el suministro de agua «vaya sobrado».
Baltasar explicó que la Conselleria está trabajando en un plan de gestión del agua para adaptarse a la directiva europea que entrará en vigor en 2015, y que implicará una subida progresiva de precios «que acerque el precio del agua a sus costes».
«Hoy no hay ninguna discusión de cómo debe subirse el precio ni de qué forma», admitió el consejero, quien remarcó que los catalanes pueden estar «tranquilos» porque no habrá un incremento en la factura del agua, aunque en el futuro haya que ir «repercutiendo» los costes del agua en el precio. Matizó que se trata de un proceso de «adaptación» a las tarifas según diversos factores.
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