El consejero se ha dirigido a los futuros economistas y empresarios que tendrán la capacidad de decidir dentro de unos años para que contribuyan con sus decisiones a desarrollar una política medioambiental acorde con las exigencias de la sociedad. Al respecto, Boné ha recalcado a los universitarios el papel que el medio ambiente tiene en el desarrollo económico de un país, «puesto que también es una oportunidad de negocio».
El consejero ha hecho referencia a la consideración que hasta hace poco tenía el medio ambiente como factor limitante del desarrollo económico de un territorio. Sin embargo, Boné ha defendido el papel de elemento generador de empleo y riqueza que puede tener. En este sentido, ha recordado que 25.000 euros de inversión en medio ambiente supone la creación o el mantenimiento de un puesto de trabajo.
Para reforzar estas cifras, el consejero ha repasado los principales proyectos del Departamento de Medio Ambiente como el plan especial de depuración, el plan de Gestión Integral de Residuos GIRA, los proyectos de gestión de purines, o la Red Natural de Aragón. Se trata de proyectos con una fuerte inversión, que mejoran las condiciones medioambientales, preservan la riqueza natural de Aragón y crean empleo.
El consejero ha animado a los estudiantes ha impulsar iniciativas en este ámbito. De hecho, les ha hablado de los nuevos campos de trabajo y oportunidades de negocio, vinculadas a la eficiencia y al medio ambiente que se están abriendo en el mercado laboral como los nuevos modelos económicos y de sistemas de gestión ambiental, así como el desarrollo de nuevas tecnologías, la investigación de nuevos indicadores ambientales o el diseño y distribución de productos ecológicos.
