La nueva instalación, con una potencia de 50 MW y tecnología de concentración cilindro-parabólica, ocupará una superficie total de 160 hectáreas, producirá energía limpia para el consumo anual de 37.000 hogares y evitará la emisión de 70.000 toneladas de CO2 al año. Cabe señalar que así se alcanzará el objetivo de cubrir un mínimo del 12% de la demanda española de energía con fuentes renovables que establece el Plan de Energías Renovables.