España continúa consolidándose como referente en energía renovable —lo vimos con este megaproyecto en el mar que tiene en vilo al mundo—. Sin embargo, ahora nos hemos llevado una cierta decepción al ver cómo la Unión Europea nos ha quitado 300 GW de golpe. ¿La razón? Una alianza de países que va a buscar un combustible inédito y entre la que nosotros no estamos: te contamos todos los detalles.
La Unión Europea, a por esta energía con su proyecto más ambicioso
El hidrógeno verde se perfila como una de las principales alternativas energéticas para lograr la descarbonización en Europa. Se trata de un combustible limpio y renovable producido a partir de energías como la eólica o la solar, mediante procesos de electrólisis que separan el hidrógeno del oxígeno en el agua.
La Unión Europea tiene el objetivo de convertir al hidrógeno verde en un elemento clave de su mix energético, dentro del Pacto Verde Europeo y la transición ecológica. Pretende instalar al menos 40 gigavatios (GW) de electrolizadores de hidrógeno renovable para 2030.
Para alcanzar esta meta, la Comisión Europea está movilizando inversiones masivas a través de proyectos como el IPCEI Hy2Tech, dotado con 8,8 mil millones de euros, o el más reciente IPCEI Hy2Infra, con 6900 millones de euros. El desarrollo del hidrógeno verde se considera estratégico para avanzar en la independencia energética.
Los 300 GW que España acaba de perder, una decepción de la UE
El proyecto IPCEI Hy2Infra es una iniciativa impulsada por la Comisión Europea para desarrollar una infraestructura de hidrógeno a gran escala en Europa. Se trata de un importante proyecto de interés común europeo en el que nuestro país no estará, vista la última resolución publicada por las instituciones comunitarias.
El objetivo principal de IPCEI Hy2Infra es instalar al menos 300 GW de electrolizadores de hidrógeno renovable en la UE para 2030. Esto permitirá producir hasta 10 millones de toneladas de hidrógeno renovable anualmente, cubriendo el 13-14% de la demanda energética de la UE.
En el proyecto participan 7 países de la UE: Alemania, Italia, Portugal y Polonia como los que más han aportado, seguidos de Francia, Eslovaquia y Países Bajos. Cada uno presentó sus propios proyectos, que en conjunto suman una inversión total de más de 47 000 millones de euros.
El motivo por el que España se ha quedado fuera: una oportunidad perdida
España ha sido uno de los grandes perjudicados en la distribución de fondos del proyecto IPCEI Hy2Infra. Nuestro país —esto hay que decirlo— presentó numerosos proyectos de calidad, punteros y futuristas. Sin embargo, no acabó convenciendo a las instituciones, dado que tenemos otros en marcha.
Esto supone un duro golpe para la industria española, que esperaba esta inyección de capital para desarrollar su sector del hidrógeno renovable. Las reacciones no se han hecho esperar, aunque recordamos que el motivo no fue la poca ambición por parte de nuestro país.
Desde el Gobierno también se ha reaccionado con sorpresa e indignación. La vicepresidenta Teresa Ribera ha anunciado que se pedirán explicaciones a la Comisión Europea, puesto que consideran que la distribución de fondos no ha sido justa teniendo en cuenta el potencial español.
Recuerda, en cualquier caso, que tenemos otros ilusionantes proyectos sobre la mesa. La generación de energía eólica offshore o la búsqueda de espacios para aprovechar la geotermia son dos de ellos. De este modo, no podemos considerar lo sucedido como un paso atrás.
Como ves, la Unión Europea ha decidido mantener a España fuera de este proyecto para obtener energía. No obstante, este asunto siempre nos seguirá dando alegrías vista la innovación que estamos manteniendo. ¿Una prueba? Esta es la nueva fuente que creó la inteligencia artificial y que incluso la NASA ha estudiado. Lo han dejado claro: podría cambiarlo todo en un futuro más cercano de lo que parece.




















