La supremacía de China sigue sintiéndose en el campo de los coches eléctricos. Y ahora más que nunca después de saberse que una firma alemana radicada allí ahora registra una marca asiática. En los últimos meses, ya hemos tenido varias pistas del avance oriental en este aspecto. Prueba clara de esto es que la marca china BYD le ha quitado el reinado de ventas de vehículos eléctricos en Europa a Tesla.
Esto pasó por primera vez en la historia el mes pasado. El crecimiento de BYD en Europa es innegable. Tanto es así que reportó una subida interanual del 169% en sus ventas durante abril. Por su parte, Tesla vivió un escenario diferente.
En su caso, abril fue sinónimo de tragedia, puesto que supuso una reducción del 49% en el mismo ejercicio. Los expertos señalan esta caída a una combinación de varias circunstancias, como el envejecimiento de la oferta de coches Tesla y la reputación dañada de Elon Musk tras su paso por la política.
Desde su irrupción en Europa, BYD no ha dejado de expandir sus actividades. Un contexto que genera preocupación e incomodidad entre los fabricantes de “toda la vida”. Si bien la corporación asiática es relativamente nueva en el Viejo Continente, su oferta de vehículos competitivos ha obtenido un gran reconocimiento por parte del consumidor. La competencia del mercado de los coches eléctricos pasa por su punto álgido y China, con empresas como BYD, planea dominar todo lo que sucede en este ámbito.
Llegó a China para conquistar el mercado y el mercado la conquistó a ella
Tras conseguir lo imposible para cambiar el futuro de los vehículos eléctricos, China ha protagonizado una noticia de índole internacional. La marca alemana Audi que fue al país asiático para triunfar entre sus consumidores hoy se ha convertido en una firma china, al menos en parte.
Fue en el Salón del Automóvil de Shanghai cuando Audi mostró ante el mundo un nuevo coche, acompañado de una nueva estrategia: una marca china. Esto no quiere decir que Audi vaya a desaparecer, pero sí que se mimetizó con China, al punto de crear una marca nacional para moverse con mayor libertad por su territorio.
Entre líneas, se trató de una admisión. El modelo que se expuso en el salón fue el AUDI E5 Sportback. Sí, su nueva marca china se llama igual, pero en mayúscula. Es decir, es AUDI no Audi.
Cómo es el AUDI E5 Sportback, el coche del Audi de China
La pieza presentada corresponde a una unidad eléctrica, nueva y china. Representa el comienzo de algo. Una nueva etapa para la corporación, la nueva corporación solo disponible en China.
Esta apuesta de Audi por el territorio asiático muestra su fuerte compromiso por el gigante oriental, algo que no extraña teniendo en cuenta que supone, según reporta China Daily, el 40% de sus ventas globales. No es un mercado más para la marca alemana, sino el centro de su éxito.
Ya no es Audi, ahora es AUDI, al menos en China
Este contexto nos lleva a preguntarnos si el AUDI A5 cumplirá las expectativas de Asia o no. No obstante, lo verdaderamente relevante de su presentación es que la marca alemana ha decidido mimetizarse con el país asiático.
La firma nueva, sin aros, también será un laboratorio. Se convertirá en el espacio donde se harán ensayos que después se desplegarán en el resto del mundo. AUDI podría ser el principio de una nueva era para la industria automovilística.
Un paradigma en el que las marcas podrían ser múltiples, con identidades adaptadas según la región en la que comercializan. Mientras esto se define, China sigue avanzando en el sector, sobre todo después de resolver el mayor problema del coche eléctrico.