Investigadores de la Universitat de Barcelona (UB) han hallado en un yacimiento arqueológico de Castelldefels los primeros restos en la Península Ibérica de una especie de cérvido de hace 90.000 años y que actualmente está extinguido.
Según ha informado el Ayuntamiento, el animal, cuyo nombre científico es ‘Haploidoceros mediterraneus’ y pertenece a la familia del ciervo actual, vivió en el Pleistoceno y hasta el momento sólo se habían encontrado restos en dos yacimientos situados en el sureste de Francia.
Dos investigadores del Seminario de Estudios e Investigaciones Prehistóricas y del Grupo de Investigación del Cuaternario de la UB han realizado el hallazgo, en la Cueva del Rinoceronte de Castelldefels.
El ‘Haploidoceros mediterraneus’ tenía unas dimensiones más pequeñas que el ciervo actual y contaba con unos cuernos muy grandes, pesados y con tan sólo dos puntas cada uno.
Los responsables del hallazgo darán más detalles este viernes en una rueda de prensa convocada en el Ayuntamiento de Castelldefels.
ep