Un nuevo estudio ha advertido que, en menos de 50 años, los episodios de lluvias extremas asociadas a las DANA (Depresiones Aisladas en Niveles Altos) podrían duplicar su volumen de precipitación respecto a la registrada el 29 de octubre de 2024, cuando Valencia sufrió uno de los temporales más intensos de las últimas décadas.
Durante aquel episodio, cayeron más de 230 litros por metro cuadrado en pocas horas, provocando más de 200 fallecidos, además de inundaciones masivas, cortes eléctricos y daños millonarios en infraestructuras y viviendas.
Según los investigadores, si continúa el ritmo actual de calentamiento global, la atmósfera será capaz de retener y liberar cantidades mucho mayores de vapor de agua, generando tormentas más violentas y concentradas en menos tiempo.
La DANA de Valencia, no es algo aislado que no se pueda repetir
Lluvias extremas como la dana en Valencia de octubre de 2024 podrían repetirse cada 47 años, según un estudio de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC).
Esta investigación del Centro de Política de Suelo y Valoraciones (CPSV) de la UPC-BarcelonaTech ha analizado la posibilidad de repetición de precipitaciones extremas en Valencia, lo que técnicamente se denomina como período de retorno.
El CPSV de la UPC estudió, a partir de series de 350 estaciones meteorológicas de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), el volumen de lluvia registrado el 29 de octubre de 2024, que fue de hasta 710,8 mm en 24 horas en estaciones concretas.
Los investigadores estimaron que lo que ocurrió en Valencia hace un año y que causó 229 fallecidos no fue un fenómeno excepcional único, sino un evento «con una probabilidad significativa de repetirse», ha informado la UPC.
Hasta el presente, los estudios habían estimado que el periodo de retorno de lluvias (concepto técnico que alude a la posibilidad de volver a repetirse el fenómeno) de esa magnitud podría ser de 500 años. Sin embargo, este nuevo estudio señala que el período de retorno sería mucho menor, de 47 años.
De hecho, los investigadores de la UPC han determinado que, a 500 años vista, la precipitación en 24 horas podría superar los 1.600 mm, es decir, más del doble del volumen de agua de la dana de hace un año.
Sin llegar a la intensidad de la dana de Valencia, cada década podrían producirse lluvias muy intensas también, de más de 400 mm diarios.
Con estos datos, los investigadores del CPSV reclaman una actualización urgente de los estudios de riesgo de precipitaciones y de los planes urbanísticos, tal como exige la Ley del Suelo de 2008.
También proponen revisar los mapas de peligrosidad de inundación, incorporando las nuevas series de datos y escenarios de cambio climático, así como prohibir nuevas urbanizaciones en zonas inundables.
El estudio señala que el incremento de la temperatura, junto con patrones atmosféricos cada vez más inestables, está amplificando la energía de las DANAs. Los modelos climáticos utilizados indican que, hacia 2070, un fenómeno similar al de 2024 podría descargar hasta el doble de lluvia con consecuencias devastadoras.
Los expertos insisten en la necesidad de adaptar las infraestructuras urbanas a esta nueva realidad climática. Plantean reforzar los sistemas de drenaje, ampliar las zonas verdes absorbentes y revisar los planes de emergencia ante inundaciones. Además, reclaman una reducción urgente de las emisiones de gases de efecto invernadero, recordando que la prevención es la única forma efectiva de mitigar estos riesgos. EFE / ECOticias.com














