“En un artículo publicado en una web de noticias internacionales, el ex presidente de México, Felipe Calderón acusa a Trump de haber abierto enfrentamientos en varios frentes y de confirmar los temores de que el nuevo presidente representa una amenaza para el comercio y el orden internacionales, el crecimiento global, el medio ambiente, las minorías raciales y religiosas y un largo etc.”
La economía y el Medio Ambiente peligran
Según Calderón (que fue presidente de México entre 2006 y 2012) el Presidente Trump ha mostrado un especial interés en golpear abusivamente a México, sabiendo que hay una enorme asimetría entre ambos países.
Señala que mientras Trump cree que «cada nación» ha estado aprovechándose de los Estados Unidos, su actitud hacia México, amenazante, insultante y con la intención de humillar, apunta a un patrón potencial que podría afectar al mundo entero, empezando por su amenaza de dejar la COP21 y de volver al carbón como forma de avanzar económicamente.
Calderón explica que Trump se ha quejado de que el Tratado de Libre Comercio de América del Norte es injusto porque hay un déficit comercial para Estados Unidos, tachando dicha acusación de absurda y de revelar un malentendido de los conceptos macroeconómicos básicos.
Argumenta Calderón que las economías mexicana y estadounidense son complementarias y que los productos de ambos países cruzan las fronteras cada día. De hecho, México es el segundo mayor comprador de bienes y las exportaciones estadounidenses han crecido un 7 % anual en promedio, por lo que apoyan directamente a más de 1,1 millones de empleos en Estados Unidos y otros 6 millones dependen del comercio bilateral.
El Nafta ha sido un motor de crecimiento en ambos lados de la frontera y una garantía de protección medioambiental. Calderón sostiene que sabotear la economía mexicana no puede contribuir al desarrollo regional. Y agrega que cuantos más empleos mexicanos destruya la posición de Trump, más inmigrantes atraerá.
Un muro insólito e ineficaz
En cuanto a construir un muro entre dos países que son vecinos, socios y supuestos aliados, el ex presidente lo califica como un acto hostil en sí mismo y explica que la experiencia dicta que tales ideas son costosas e inútiles, además de los obstáculos técnicos, ambientales y legales que debería superar, cuando la inmigración neta de trabajadores mexicanos hacia los Estados Unidos cayó a cero en 2010 y actualmente es negativa.
Finalmente, Calderón insiste en que la cooperación internacional es esencial y que más allá del muro sin sentido y de su financiación, hay mucho más en juego. Recuerda al presidente de los EEUU que los fundamentos sobre los que se construye la civilización moderna están en peligro: la libertad, el respeto entre las naciones, el imperio de la ley, la democracia, el libre comercio, la libertad económica y la protección medioambiental, todo lo cual es esencial para impulsar el crecimiento.