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martes, marzo 21, 2023

Un estudio propone un suministro de energía más seguro a través de una red inteligente

Un nuevo estudio sugiere que Europa podría asegurar su abastecimiento energético y mitigar el cambio climático mediante las energías renovables. Sin embargo, uno de los inconvenientes de éstas es su intermitencia, característica que puede acarrear complicaciones en el sistema de suministro.

El estudio también explica cómo se podría aprovechar una «SuperSmart Grid» o Súper Red Inteligente para producir energía de forma descentralizada y asegurar su transmisión a larga distancia. En última instancia, una red de distribución eléctrica con sus características podría permitir que todo el sistema energético procediera de energías renovables en el 2050. El estudio es parte de CIRCE, un proyecto financiado por el Sexto Programa Marco (6PM) de la UE.

Un nuevo estudio sugiere que Europa podría asegurar su abastecimiento energético y mitigar el cambio climático mediante las energías renovables. Sin embargo, uno de los inconvenientes de éstas es su intermitencia, característica que puede acarrear complicaciones en el sistema de suministro. Además, la red de suministro europea actual ha de renovarse, puesto que no es capaz de cubrir la creciente demanda energética.

Los investigadores de CIRCE proponen que se desarrolle una extensa red para que la electricidad generada a partir de energías renovables pueda recorrer grandes distancias. A este concepto lo han llamado Super Grid (“Súper Red”). Adicionalmente, una opción posible para superar los problemas que ocurren en la actualidad sería la descentralización de la producción de la energía renovable por medio de instalaciones pequeñas y repartidas, es decir, una Smart Grid o “Red Inteligente”.

Por lo tanto, mediante la conjunción de estas dos opciones se daría paso a la SuperSmart Grid o “Súper Red Inteligente” (SSG). La SSG poseería la capacidad de suministrar electricidad a un área extensa y conectaría instalaciones de generación pequeñas y repartidas. Según los socios de CIRCE, una SSG eficiente sería capaz de compensar todo tipo de fluctuaciones que se produjeran en un área extensa.

Para que Europa cumpla con sus objetivos de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero entre un 60% y un 80% para el 2050 (en relación a los niveles preindustriales), es necesario que exista un sistema basado puramente en energías renovables, según afirmaron los investigadores. Éstos añadieron que dicho sistema debería cumplir con la política que restringe el aumento medio de la temperatura global a menos de 2 grados centígrados.

La energía renovable que importase la UE podría contribuir a lograr el objetivo de Europa consistente en que el 20% de toda la energía proceda de fuentes renovables en el plazo de los próximos 12 años. En este sentido, diversas instalaciones, como centrales termosolares situadas en los desiertos del norte de África, podrían abastecer de energía renovable a Europa. Los expertos coinciden en que las condiciones de dichas zonas son más rentables para la producción de energía solar.

La integración del mercado de la energía en Europa daría estabilidad al sistema y los consumidores podrían comprar energía a menor precio. Según los investigadores, la electricidad procedente de fuentes renovables del norte de África aumentaría la seguridad energética al diversificarse el origen de las importaciones: el mercado energético a escala mundial garantiza un suministro de energía importada más estable.

CIRCE es un proyecto financiado con 10 millones de euros mediante el Sexto Programa Marco (6PM) de la UE que estará en marcha hasta 2011 y se dedica a evaluar los efectos del cambio climático en el área del Mediterráneo.

 

Euroalert

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