A lo largo de los últimos años, el consumo de energías renovables se ha visto incrementado. La toma de conciencia de que recursos de los que dependemos en numerosos ámbitos de nuestra vida cotidiana, como el petróleo, son agotables, ha hecho cada vez más rentable y necesaria la explotación de nuevas fuentes de energía. De hecho, el Plan Energético de Canarias (Pecan) pretende conseguir, en 2015, que un 30% de la energía eléctrica proceda de fuentes de energía renovable, un objetivo ambicioso que cumple con las previsiones de la Unión Europea, cuya cifra era de 22,1% para 2010.