Actualizar

jueves, septiembre 21, 2023

A toda máquina con la ‘Transición energética’

Como siempre, una de las claves de las ayudas públicas a los programas de transición energética está en que sean multiplicables, por así decir.

El impacto del plan de ayudas

El nuevo plan de ayudas, con cargo al presupuesto del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, es la primera línea a gran escala, y a nivel estatal, dirigida específicamente a autoconsumo y almacenamiento de energía, y ha sido consensuado entre el Gobierno y las Comunidades Autónomas.

Las ayudas se articularán en seis programas, que repartirán:

  • Hasta 900 millones para
  • Hasta 220 millones de euros para almacenamiento detrás del contador.
  • Y hasta 200 millones de euros para climatización y agua caliente con energías renovables.

Las ayudas fomentarán la creación de empleo de proximidad y la mejora de la competitividad de empresas y economías domésticas al reducir sus costes energéticos.

Así, se prevé que estas ayudas:

  • permitirán construir 1.850 MW renovables, incluyendo calefacción y refrigeración en más de 40.000 viviendas;
  • crearán más de 25.000 empleos;
  • servirán a un aumento del PIB en torno a los 1,7 millones de euros por cada millón de ayuda;
  • reducirán nuestras emisiones de CO2 en más de un millón de toneladas al año.

Por supuesto, las ayudas también contribuirán a alcanzar los objetivos de energías limpias y reducción de emisiones marcados por España en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima, el PNIEC, y en el que se prevé una presencia de renovables sobre el uso final de energía del 42% en 2030.

El programa de ayudas: seis conjuntos de actuaciones

Las ayudas se canalizarán a través seis programas, la mitad dirigidos a sectores económicos concretos y la mitad a viviendas. Estos son:

  • Autoconsumo y almacenamiento en el sector servicios.
  • Autoconsumo y almacenamiento en otros sectores productivos, como la industria o el agropecuario.
  • Incorporación de almacenamiento en autoconsumos existentes en sectores económicos.
  • Autoconsumo y almacenamiento en el sector residencial, el sector público y el tercer sector.
  • Incorporación de almacenamiento en autoconsumos del sector residencial, sector público y tercer sector.
  • Climatización y agua caliente sanitaria obtenida con renovables en el sector residencial, incluida la vivienda pública protegida.

Para que os hagáis una idea del calado de estas ayudas, se podrá subvencionar la inversión en equipos y materiales; la obra civil; los equipamientos electromecánicos, hidráulicos, de control y auxiliares; los sistemas de gestión y monitorización, la redacción de proyectos, memorias técnicas y dirección facultativa, entre otros…

Para aumentar la información y la sensibilización de la sociedad, todas las instalaciones subvencionadas tendrán que incluir un sistema de monitorización: en empresas y administraciones, su rendimiento deberá reflejarse en una pantalla a la vista del público o los trabajadores; en viviendas, será accesible mediante un dispositivo móvil.

La cuantía de las ayudas variará en función del beneficiario y del tipo de instalación. Por ejemplo, en el caso de la energía solar fotovoltaica, las ayudas abarcarán desde el 15% para una gran empresa hasta el 45% para una pyme o un sistema pequeño, inferior a 10 kW; los particulares, o sea, cada uno de nosotros, podremos beneficiarnos de un 40% –o hasta el 50% en los sistemas de autoconsumo colectivo– y las administraciones públicas hasta un 70 %.

En el caso de la energía eólica, la subvención oscilará entre el 20% para la instalación más grande en grandes empresas y el 50% en los sistemas más pequeños para pymes; los particulares tendremos hasta un 50% y las administraciones públicas un 70%. En las instalaciones de almacenamiento detrás del contador (esto es, baterías), las ayudas para las empresas variarán entre el 45% y el 65%, dependiendo de su tamaño, mientras que los particulares, administraciones y entidades del tercer sector podrán beneficiarse de un 70%.

En climatización con renovables, la subvención dependerá de la tecnología empleada –como la biomasa o la geotermia–, y será del 40% al 70%. Las Administraciones públicas propietarias de edificios residenciales podrán obtener un 70%. Como en el caso del MOVES III, y para afrontar el reto demográfico, todos los montos anteriores se incrementarán en un 5% adicional en aquellos municipios con menos de 5.000 habitantes y en los municipios con menos de 20.000 habitantes en entornos rurales cuyos diferentes núcleos de población tengan menos de 5.000 habitantes.

El IDAE, el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía, se encargará de coordinar las actuaciones y de hacer un seguimiento de su evolución, de acuerdo con el procedimiento usado exitosamente desde 2019.

Fuente: La energia de luzia

ARTÍCULOS RELACIONADOS

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Lo último

Antes de irte

No te lo puedes perder

Otras noticias de interés