Durante tres días, cerca de veinte dirigentes se dieron cita en Riad, Arabia Saudí, para participar en la novena edición de la Future Investment Initiative (FII), entre ellos el presidente interino sirio Ahmad al Chareh y el vicepresidente chino Han Zheng, junto a varios ministros y más de 150 representantes del sector privado.
Creado en 2017 este foro se ha convertido en una vitrina para el ambicioso programa de reformas Visión 2030, con el que Arabia Saudita busca reducir su fuerte dependencia de los combustibles fósiles, pese a ser el mayor exportador mundial de petróleo.
El ministro de energía árabe ha retado a los chinos a estar atentos, puesto que, según advirtió, Arabia Saudita está dispuesta a arrebatar a China su liderazgo en el campo de las baterías que se emplean a nivel mundial en el almacenamiento de energía.
Arabia Saudí: impulsa la tecnología de baterías y almacenamiento de energía
El ministro de Energía de Arabia Saudí, Abdelaziz bin Salmán, retó este martes a China a competir en el campo de la tecnología de baterías y almacenamiento de energía, un sector por el que el reino árabe está apostando para diversificar su economía fuertemente dependiente del petróleo.
«Les digo a los chinos: ¡Atención! El próximo año entramos con fuerza en la competición en el campo de las baterías«, dijo el ministro durante una conferencia en el marco de la novena edición del foro Future Investment Initiative (FII) de Riad, más conocido como el ‘Davos del Desierto’.
Bin Salmán afirmó que Arabia Saudí debe ser competitiva a la hora de «proveer al mundo con energía», por lo que la sostenibilidad «es la base del desarrollo de la nueva economía, de la industria y de los servicios«. «Tenemos que prepararnos hoy para el futuro de 2030 y el posterior», indicó, en referencia al plan Visión 2030 impulsado por el príncipe heredero y primer ministro de Arabia Saudí, Mohamed bin Salmán, para diversificar la economía del reino.
Políticas de energías sostenibles
De acuerdo con el ministro, la economía saudí «acabará» si no se adquiere «una fuente sostenible de energía, ya que los sectores de la industria, la inteligencia artificial (IA) y el entretenimiento requieren mucha energía porque evolucionan».
En este sentido, indicó que Arabia Saudí quiere «comprobar» que está «entre los competidores» por el suministro de energía al mundo, con el objetivo paralelo de apoyar la transición energética, al sector industrial, a la diversidad de servicios y la sostenibilidad. «La nueva economía cambia el estilo de vida del mundo, y requiere mucha energía», sentenció.
Las autoridades de Arabia Saudí están centrando sus inversiones, entre otros sectores, en las baterías y en el almacenamiento de energía, con el objetivo de generar más de la mitad de su electricidad a partir de fuentes renovables y así reducir su dependencia del petróleo.
Dentro de lo paradójico que resulta que el mayor exportador de petróleo del mundo abogue por la transición ecológica y la sostenibilidad energética, la realidad es que el país y su nueva economía necesitan mucha energía.
De hecho, el objetivo que se han impuesto es que la generación eléctrica de la nación dependa en un 50% de fuentes de energías renovables, respaldadas por sendos sistemas de baterías, que aseguren un suministro fluido y constante y de las que pretenden liderar su producción. EFE / ECOticias.com
 
			 
			













