España es pionera en cubrir las carreteras con paneles solares. Está claro que el uso de los paneles solares es efectivo para obtener energía de forma limpia, pero ¿qué pasará si colocáramos un techo cubierto con paneles en todas las carreteras? Son zonas generalmente expuestas al Sol y que ya se encuentran modificadas por la implantación de las carreteras, por lo que el impacto visual en el paisaje no supondría un problema.
En la última década, el desarrollo de las energías renovables a nivel tecnológico y empresarial ha vivido un crecimiento exponencial. Si en 2011 la capacidad de las renovables llegaba a los 1,4 teravatios (TW) anuales – 1,4 billones de vatios-, en 2021 se alcanzaron los 3,1 TW, con la energía solar representando un 40% de la cantidad total y, por lo tanto, siendo una de las fuentes principales a considerar.
No obstante, su capacidad todavía dista mucho de poder reemplazar los combustibles fósiles. En 2022, según la Agencia Internacional de Energía (AIE), el consumo humano estuvo cerca de los 27.000 teravatios al año. La energía solar es sumamente atractiva a nivel producción y consumo. Su instalación no es excesivamente complicada, al igual que su mantenimiento, aunque su problema es que las placas solares ocupan espacio. Bajo estas circunstancias, las carreteras podrían ser el lugar ideal para colocarlas.
Carreteras con paneles solares: España podría ver esta opción de cerca
Tomando en consideración estos datos, una de las propuestas más ambiciosas y revolucionarias es la del estudio de Earth’s Future: Roofing Highways With Solar Panels Substantially Reduces Carbon Emissions and Traffic Losses. Una exposición que España podría mirar muy de cerca e implementar en cualquier momento debido a la importancia que le otorga a la energía solar. Este análisis de un equipo de investigadores chinos y estadounidenses fue publicado en la revista Earth’s Future.
Evaluaron si esta idea podía salir del papel y pasar a la práctica. Sus conclusiones no solo fueron afirmativas, sino que además mostraron ante el mundo los grandes beneficios que implicaría. Estudiaron si era posible colocar 52.300 millones de paneles solares a lo largo de 3,2 millones de kilómetros donde existen autopistas en el planeta actualmente. Estas ‘carreteras solares’ zanjarían definitivamente el problema de espacio al que se enfrenta la eficiente energía solar sin estropear zonas naturales.
Hablamos de otro nivel porque de esos 3,1 teravatios anuales de 2021 pasaríamos a un potencial de 17.600. Una cantidad abrumadora que supone cuatro veces la producción de energía de Estados Unidos cada año, pudiendo compensar cerca del 29% de las emisiones actuales de CO2. Además, techar las carreteras podría ostentar otros beneficios importantes más allá de su efecto en el combate contra el cambio climático.
Cubriendo las vías, estas quedarían protegidas en gran medida de precipitaciones y otros fenómenos meteorológicos adversas que suelen ir deteriorando el terreno donde los automóviles y generan un gran número de fallecimientos al año. El análisis publicado también expone que 150.000 vidas se salvarían al año y que los daños socioeconómicos y materiales que se ahorrarían también serían imponentes, de 0,43 billones de dólares por año.
España podría animarse a probar los paneles solares en carreteras
Pero para que un proyecto de estas características pueda funcionar en España, o en cualquier parte del mundo, deben solventarse algunas de las complejidades técnicas que debe afrontar la interacción entre vehículos y placas, además de “reducir la dependencia de los escasos recursos hídricos para la limpieza de paneles fotovoltaicos en regiones áridas” y “mejoras las técnicas de previsión y despacho para fortalecer la capacidad de la red para acomodar la energía intermitente del sistema fotovoltaico de la carretera”.
En definitiva, España podría involucrarse en proyectos de carreteras con paneles solares si la investigación avanza. Para ejecutar una operación así, sería necesaria una gran coordinación entre países, además de un firme compromiso entre naciones por la apuesta de la energía solar.
